27. 𝕽𝖊𝖙𝖗𝖔: 𝕰𝖑 𝖙𝖊𝖗𝖈𝖊𝖗 𝖆𝖓𝖎𝖛𝖊𝖗𝖘𝖆𝖗𝖎𝖔 𝖞 𝖑𝖔𝖘 𝖕𝖗𝖎𝖒𝖔𝖘 𝖉𝖊 𝖑𝖔𝖘 𝖓𝖔𝖛𝖎𝖔𝖘. (𝕸𝖔𝕾𝖍𝖆𝖓𝖌/𝕭𝖎𝖓𝖌𝕼𝖎𝖚)

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Shang Qinghua observaba con felicidad el letrero con letras neón de color rojo. Metió sus manos en su nueva chamarra de piel, mientras seguía esperando a Shen Qingqiu, su primo.

— Hey —Shen llevaba unos pantalones acampanados con una chamarra plateada —, disculpa. Binghe no estaba listo aún.

— Hola. Disculpa, pero mi primo aún no estaba listo.

Qinghua desde el momento que llegaron sólo había posado su vista en el extraño que estaba con la pareja, pues no lo conocía.

— Tsk —el hombre alto, de ojos azules, cabello con crepe y una linda chamarra de piel azul, chisto—, no me eches la culpa. Tú te tardaste porque querías verte bien y a cada rato cambia-

Luo en un rápido movimiento tapo la boca de Mobei Jun.

— ¿Por qué no entramos? Hace frío.

Shen sonrió enternecido por su menor, mientras un click sonó en su mente.

—Ah... Cierto, Shang él es MobeiJun —el alto movió su vista a Qinghua mientras este daba una sonrisa nerviosa—, MobeiJun, él es mi primo Shang Qinghua.

—Mucho gusto —el de ojos azules le extendió su mano.

— Igualmente — el de lindos mofletes la tomo mientras una corriente lo atravesaba.

La pareja seguidos de dos personas que estaban emocionadas y sentían sus corazones latir muy fuerte, aunque el alto seguía con su expresión neutra entraron al establecimiento.

El lugar no estaba tan lleno aún, había una gran bola de cristales colganda del techo, ocasionando que muchas luces se dispersaran por el lugar. La pista de baile estaba divida en varios cuadros los cuales tenían diferentes colores. 

Habían hecho una reservación así que fue sencillo tener una mesa. Comieron hamburguesas y tomaron malteadas, mientras la música de fondo era cada vez más pegajosa y la plática más amena.

— ¿Así que estas de visita?

— No, comenzaré a estudiar este año en la Universidad donde va Luo.

Shang Qinghua se sonrojo.

— Nosotros trabajamos en esa universidad.

— Bien —MobeiJun había sonreído, la cual había hipnotizado al que estaba sentado a un lado de él.

— Oh, Luo —Shen estaba sonriendo mientras su novio le daba una papa a la francesa en la boca—, ya come. No seas desastroso.

El menor le dio una sonrisa mientras regresaba a devorar su hamburguesa. 

Cuando terminaron de comer, pidieron unas cuantas cervezas. Al tener alcohol recorriendo su organismo el de ojos café, se sentía con más valor.

— Mobei...

— Mande —este había dejado su bebida después de darle un largo trago.

— ¿Quieres bailar? —el bajito tenía las mejillas sonrosadas producto de su timidez o de lo que ya había ingerido, nadie lo sabía.

No contesto, pero en su mente sólo había una palabra para describir lo que veía "lindo". Saliendo de su cavilaciones asintió y tomo su mano para ir a la pista.

— Vaya —Luo, quien estaba por pararse también volteo a ver a su novio—, ¿Mobei Jun bailando?, bebé debo de ver eso.

— Binghe —Shen tomaba la mano de su novio que parecía un niño tratando de molestar a otros—, déjalos. Shang por fin se esta dando una oportunidad después de ese estúpido.

— Pero —los labios del más alto fueron cayados por los labios del contrario, no podía competir contra eso—, bueno. 

— Eso es. Por cierto, me gusta tu crepe.

— A mi me gustas tú.

— ¿Quién diría que el tímido Binghe fuera tan coqueto?

—Sólo si se trata de ti.

Shen ya sentía sus mejillas calientes así que mejor opto por darle lo que le había comprado.

—Toma —le extendió una cajita al contrario—, felices 3 años.

Luo abrió la pequeña caja y se abalanzo nuevamente sobre su novio. 

Era un lindo collar con un cubo rubik armado solamente en tres caras.

—Recuerda que viniste a ponerle estabilidad a mi vida —menciono Shen mientras le ponía el divertido y curioso artilugio.

—Tú viniste a ponerle lo bonito a mi vida. Te amo.

—Te amo más —el mayor le mostro el suyo, este cubo en cambio tenía las tres caras restantes ordenadas.

La pista se comenzó a llenar de sonrisas, alegría y diversión. La música invitaba a mover cada parte del cuerpo. Shang por fin sonreía otra vez.

Mobei Jun lo habían empujado sin querer por lo que choco contra el bajito mientras lo veía a los ojos. No sabía si era el ambiente, el alcohol que lo hacía sentir más libre o sólo la persona que tenía entre sus brazos, pero sus labios fueron a chocar contra los del contrario. 

Shang Qinghua aún sorprendido movió ligeramente los suyos, mientras todo el mundo exploto, pues esta vez sentía que las cosas irían bien. 

Luo y Shen los veían desde lejos, ambos se sonrieron y se besaron una vez más, había sido buena idea traer a sus primos a esa disco donde podías ser libre cada noche. 


DanmeItoberDonde viven las historias. Descúbrelo ahora