¡Ron, al rescate! [Finalizada]

Capítulo 37.-

Ron se sintió confundido al ser prácticamente arrastrado por Harry luego de que la noche cayera, su día no había sido el mejor y realmente no entendía el porqué estaba siendo llevado aun lugar que aun no se le describía.—¿Harry?—Repitió sin entender.—¿A-adonde me llevas? P-pensé que ya todo estaba.. claro.—su voz sonó débil. Afectando de cierta forma al chico de ojos verdes.

Harry respiró profundo. Se preguntó si era correcto decirle la verdad, Ron al parecer pensaba que aun Severus y él continuaban en una relación y si bien, aun no había roto formalmente, primero necesitaba asegurarse de qué Severus entendiera y notara los sentimientos que tenia por Ron.

Al llegar al pequeño salón que Severus había utilizado tiempo atrás, el joven de cabello negro abrió las puertas. Ahora estaba listo para aquel encuentro. Harry no podía mentirse así mismo. Dolía, pero la felicidad de Severus y la Ron estaba sobre cualquier cosa. Si no hubiera sido por andar de entrometiendo leyendo las cartas de Ron, jamás hubiera logrado descubrir lo que en verdad ocurría.

—¿Qué hacemos aquí ?—Preguntó algo tembloroso el de ojos azules.—Yo, sobre Snape. Harry por favor, por favor, no quiero estar envuelto en esto ¿Si? T-te juro que me iré muy lejos cuando acabe la escuela y...

Harry suspiró, la túnica de Ron, su amigo estaba vestido con una pijama que tenia ilustraciones a la Snicth dorada y escobas.—Necesito que entres y esperes aquí ¿Vale?—Murmuró.

Ron no se sintió muy seguro.—¿E-esperar? ¿A quien?—Preguntó, aunque era obvia la respuesta.—Snape y yo no tenemos nada que..

Harry empujo a Ron dentro del pequeño saloncito, las puertas se cerraron automáticamente, escuchó los golpes del pelirrojo al otro lado de la madera que les separaba.—¿He.. Sac? ¡¿Sac?!

La elfina apareció en solo cuestión de segundos.—Mi amo, el señor Snape ya esta acercándose. Señor Harry Potter.

El Gryffindor suspiró complacido.—Perfecto.—Varios pasos se escucharon y el par se escondió fácilmente tras una enorme y gruesa cortina que estaba en uno de los rincones del pasillo.

Severus apareció, imponente, y totalmente vestido negro, aunque con el cabello algo desalineado.

Por suerte, Severus no descubrió sus escondites, ya que, su mente solo estaba concentrada en una sola cosa: Sac le había informado que, Ron quería hablar con él en este lugar.. No lo entendía, sabia que el joven podía entrar sin dificultad alguna a sus habitaciones. Las puertas del pequeño salón de abrieron, Ron casi cae pero, Severus le sostuvo, evitando que se lastimara.

—¿Te encuentras bien? ¿Qué sucede?—Preguntó el profesor.

Harry aprovechó el hecho de que Snape estuviera justamente en ese momento con la Guardia baja, le empujó haciéndole entrar al salón finalmente junto a Ron, y cerró la puerta asegurándose de que, ninguno pudiera abrirla por al menos dos horas.—Gracias, Sac.

La elfina observó al joven de ojos verdes, este se limpió rápidamente su rostro, al parecer por un par de lágrimas traicioneras que habían escapando de sus orbes.

La elfina suspiró, si bien, aquel joven nunca había sido de su agrado, agradecía el gesto que estaba haciendo por su amo, para Sac la felicidad de su amito era incluso mas importante que su vida.—Sac ha hecho pudin de chocolate ¿Quiere el señor Potter una rebanada?

El joven Gryffindor sonrió tembloroso.—Si, me gustaría mucho.

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Ron tuvo que controlar su respiración al descubrir el verdadero plan de Harry tras eso.—Y-yo..—Tartamudeo.—Harry me dijo que.. esperara aquí, pero te juro que no sabia que tu vendrías.