¡Ron, al rescate! [Finalizada]

Capítulo 18.

Esto no es un simulacro, Allen al fin se ha dignado a actualizar esta historia.

—Le diré mis sentimientos a Harry.

—¿D-decírselos?—la sonrisa se borró del rostro del pelirrojo, sintió entonces como en su pecho se esparcía una desagradable sensación.—Oh.. Bueno.—Murmuró.—Si, ya es hora.

— Harry sabe que soy yo quien le envía las notas, y él también me ha enviado notas a mi. Somos conscientes él uno del otro y no quiero esperar más para lo obvio.—Severus se acomodó quedando sentado, sin notar que el brillo de los ojos de Ron habían desaparecido.—Quiero hacerlo mi pareja.

Ronald trago ruidoso, sintió un doloroso nudo en su garganta, sus ojos comenzaron a picar.—Estoy seguro que todo resultará bien.—El chico bajo de la cama mientras Snape asentía,  el hombre imitó a su alumno mientras una leve sonrisa se formaba en sus labios.

—Quiero.. Quiero que me ayudes.—Le pidió al más joven.—Hay un lugar secreto que quiero que prepares. Soy un asco para las decoraciones pero Sac podría ayudarte.—murmuró  levemente avergonzado.—No es mucho, pero que quiero hacer una cena para Harry y ahí le diré mis sentimientos.

Ronald asintió tratando de fingir una gran sonrisa.—Confía en mi, Severus ¡Será la mejor!

El mencionado sonrió finalmente, y abrazo al chico sin poder evitarlo. Ronald olio el aroma de Snape y enterró sus dedos en su túnica, las lágrimas se asomaron en sus ojos pero sin saber como, fue capaz de controlarlas.—Gracias.—Susurró en su oreja el profesor.—No habría llegado hasta aquí sin tu ayuda.

Ronald asintió por segunda vez.—Y..¿Cuándo lo harás?—Preguntó al romper el abrazo, sus dedos temblaron pero fue capaz de ocultarlo.

—Mañana mismo, al anochecer.—Le anunció viéndole a los ojos.—¿Para qué esperar más?—Preguntó al pelirrojo.—mientras la respuesta sea positiva todo habría valido la pena.

Ronald rodo los ojos.—No creo que vaya decirte que no.—dijo y soltó un suspiró mientras observaba la sonrisa del contrario.—pero si lo hace, no te preocupes. Tiraremos el cuerpo de Harry al lago.

Severus soltó una risita, estiró su brazo y jalo la oreja del chico.—Si lo tiramos al lago, no  quedará nadie que me quiera idiota.—le regaño, Ronald soltó un chillido.

—No te preocupes, Severus. Me sacrificare.—el pelirrojo se llevó una mano hasta la frente melodramáticamente.—Me quedaré contigo hasta tu muerte —Murmuró. Sus oídos pitaban al escuchar los latidos de su corazón aumentar.—Y así ser el dueño de todo tu dinero. 

—¿Y si no tengo dinero? ¿Te quedarías igual?—Preguntó mirando los ojos azules del chico.

Ronald enrojeció y sus palabras se atragantaron mientras decía un simple y sencillo "si"

Los brazos de Severus nuevamente rodearon la cintura de Ron y lo estrecho contra su cuerpo.—es bueno escuchar eso.—Susurró.

Las mejillas de Ronald estaban enrojecidas, su corazón latía apresurado y esperaba que Snape no lo notará. Se había confesado con palabras disimuladas pero sabía bien que Severus nunca lo escogería a él,  Harry era superior en muchas cosas.

¡Plop¡

—¡Amo, Sac quiere…!—la elfina guardo silencio bruscamente al ver que su amo estaba abrazando al pelirrojo. La elfina se sonrojo.—Lamento la interrupción, amo.

Severus suspiró, y soltó al chico.—¿Qué sucede?—Preguntó a la elfina.—¿Alguna emergencia?

La elfina negó,—Sac quería saber si el amo quería té.—La pequeña bajo la vista al suelo.—¿El amo quiere té o ya va a dormir? ¿Quiere que prepare su baño?