¿Gemelos? [g!p] ; scarletwidow - Wandanat

10°

Natasha's pov:

-Todo estará bien, Natasha. Te prometo que yo jamás quise mentirte. - Murmuró Peter. - Era para protegerlos, proteger a Wanda y no volver la situación más complicada, por eso me encargaba de cuidarte todo éste tiempo... - Murmuró acariciando mi mejilla. - Yo los amo, somos familia.

Sonreí mientras él me abrazaba. Me siento algo más protegida.

-Me duele saber que mañana mi hijo me verá y él no sabrá de mí, no me amará, creerá que lo abandoné. - Sollocé.

Peter acarició mi espalda y negó rápidamente.

-Escucha... Wanda le habló de ti, todos éstos años él ha crecido sabiendo que hubo una mujer llamada Natalia Romanova que lo amaba... Mi sobrino no es idiota, es un gran chico. Te prometo que él... Estará feliz de verte.

-¿Crees que esté feliz? - Pregunté insegura. - Él preguntará y yo no tendré respuestas... ¿Qué clase de madre seré?

-Eres la mejor, Natasha. La mejor madre... - Suspiré y lo sentí abrazarme nuevamente.

-Natasha. ¿Podemos hablar? - Preguntó Wanda. Me alejé lentamente de Peter.

-No creo que sea el momento, Wands. - Dijo el castaño y ella lo ignoró observandome con súplica.

-Sí, gracias, Peter... Yo lo arreglaré. - Murmuré y él se levantó.

-Estaré dentro, por si acaso. - Sonreí levemente ante su comentario y Wanda se sentó a mi lado en el banco.

-¿Qué pasa? - Pregunté.

-No confíes en Peter. - Dijo rápidamente. - No lo hagas, él... Él es malo.

-¿Y debo confiar en ti? Me mentiste por diez años, estuviste en la sombra como si nada mientras yo me caía a pedazos. - Dije molesta. - Y Peter me llamaba cada vez que podía para saber de Billy, Billy lo conoce, él sabe de su tío Peter.

Ella apartó la mirada.

-Créeme, él no es bueno. Él...

-Él nada, Wanda. - Dije rápidamente. - Déjalo en paz, él me ha cuidado, de la forma en la que tú no lo hiciste.

-Te cuidé, Natasha. Todo lo que pude. ¿Crees que no me dolía no poder acercarme a abrazarte por temor a verte morir? ¿Crees que no amo a mi hijo?

-A mi también me hiciste falta, Wanda. - Dije molesta. - Y ya no, ahora que vives ya no sé ni siquiera de quien me enamoré.

La observé dolida, con mucha molestia. Hace un par de horas yo habría dado lo que sea por verla, por besarla... Ahora quiero golpearla, quiero alejarla de mí. Suena horrible, pero preferiría que esté muerta antes que saber que me mintió de ésta forma.

¿En quién puedo confiar? En nadie.

Absolutamente todos me mintieron, Peter al menos venía a verme. Pietro se alejó y enviaba regalos o llamaba sólo en ocasiones puntuales... Los padres de Wanda no hablaron más con mi hijo, no había forma de mantenerlo conectado a su madre. Lo intenté y sin embargo todos me dieron la espalda, todos me fallaron, todos me abandonaron.

¿Por qué confiaría en Wanda?

-Natasha... Sigo siendo yo. Te mentí por tu bien, Pietro no podía mantener contacto contigo por temor a que te ataquen o se enteren de que yo vivía, a él también le dolió alejarse, mi madre me reprocha diariamente él no poder ver a Billy, ella te amaba, Nat.

-¿Qué es tan difícil? ¿En qué estás metida?

-Te lo dije. Espionaje. - Murmuró. - Espionaje para el gobierno, para los federales... Es... Complicado.

-¿Haz matado personas? - Preguntó rápidamente.

-No, Natasha. Jamás, me he mantenido al margen, he disparado, jamás ha muerto alguien por mis disparos, y espero no tener que asesinar a nadie, yo me encargo del papeleo por lo general, aunque si estoy entrenada para ésto, ser espía es más que sólo asesinar gente y golpear a personas malvados.

-Supongo... No sé que hacen los espías. - Dije angustiada. - ¿Por qué no volviste?

-Si volvía significaba que te encontrarían conviviendo conmigo, verían a Tommy vivo y... Clint tuvo que negociar con Sam para entregarle al niño, ni Barnes ni Rogers lo saben... - Murmuré. - Y le prometió que lo haría desaparecer con una buena familia, finalmente le dijo que se lo dio a unos rusos de apellido Romanova, Walter y Lina, sin embargo ellos no existen, son documentos falsos que he usado... Yo soy Wanda Romanova, pero no estoy conectada a aquél matrimonio, créeme que si fuese más fácil de explicar... Lo haría, pero... Es demasiado y... No quiero complicarte, amor.

-No me digas amor, por favor. ¿Qué sabe mi hijo sobre mí? - Pregunté mientras me imaginaba a mi pequeño creciendo sin mis mimos... Sin todo el amor que debía darle.

-Que lo amas, que estabas muy feliz de tenerlo, que eres la mujer más linda e increíble del universo.

-¿Vio fotos mías?

-Sólo las que tenemos de jóvenes y un par embarazada... No tenía más.

Asentí lentamente.

-¿Qué le dirás?

-Que fue mi culpa, que debía cuidar mejor de ustedes... Yo debía estar preparada, tal vez debí decirte que era espía, pero eso te habría puesto en peligro. Era justamente lo que no quería.

-¿Por qué lo hiciste entonces? - Pregunté molesta. - Nos pusiste en peligro.

Wanda observó el suelo angustiada pero asintió.

-Lo lamento tanto... Si pudiese retroceder el tiempo, créeme que habría evitado cruzarme en tu vida y enamorarme de ti, pero no puedo. Te amo y... No puedo evitar hacerlo.

-¿Sabes cuál es el problema, Wanda? - Pregunté limpiando las lágrimas que caían por mi rostro nuevamente. Ella negó y me observó de la misma forma, llorando. - Que yo te sigo amando, y es difícil verte... Tengo un dilema enorme entre besarte y golpearte, quiero estar dormida sobre tu pecho y a la vez me das asco, te odio pero también quiero entenderte, ni siquiera yo entiendo que me sucede... Quiero que me expliques todo, pero también necesito tenerte lejos y que me dejes pensar. Me dueles demasiado, Wanda... - Sollocé. - Me dueles más ahora que cuando eras un recuerdo.

Me levanté rápidamente dejándola sola. Entré a mi casa ignorando sus llamados. Realmente estoy dolida, sólo quiero descansar y esperar a mañana... Para poder hablar mejor.

No quiero odiarla, pero cada vez que abre la boca siento ganas de golpearla por ser una jodida mentirosa.

Incluso me duele mucho más saber que me apartó de mi hijo que saber que fingió su muerte.

Vi a Peter sentado en el sofá frente a la chimenea y me rodeó con sus brazos rápidamente. Sollocé contra su pecho.

-Sh... Ya está, estoy aquí, Nat. Estoy aquí...

Es verdad, él siempre estuvo aquí. Confío más en él que en Wanda.

Nota de autor:

¿Nos leemos en un rato?

Hasta el momento, ¿qué les parece éste ff? ¿Aburrido?

Por cierto, el de arriba es Peter Maximoff por si alguien no sabía.

-Codex.