¿Gemelos? [g!p] ; scarletwidow - Wandanat

13°

Natasha's pov:

Caminamos dentro del café. Wanda dejó su auto fuera, fue tan insistente en ir primero a buscar el auto y luego desayunar juntas que no me quedó de otra más que decirle que sí.

-¿Ya estás cómoda? - Pregunté al ver a Wanda en una esquina mientras observaba a la pared. Nadie podría verle el rostro, excepto la camarera, sin embargo me comentó de los guardaespaldas que me seguían y noté a Coulson, ya que es el jefe encargado, y Wanda me los hizo notar.

-Sí. Ya ordené, deberían traernos todo en un par de minutos. - Murmuró. - Gracias por venir y no sucumbir ante los encantos de Diana, es realmente linda y...

-¿Por qué me dices cosas buenas sobre ella? ¿No debería caerte mal? - Pregunté y Wanda asintió lentamente.

-La detesto, pero eso no significa que voy a descalificarla. - Dijo rápidamente y eso se me hizo atractivo. - Es decir, la chica es linda, educada, le gustas y se nota, claramente yo te amo, pero la decisión está en ti... Tu elegirás quien te hace mejor, tienes derecho a hacerlo, finalmente no tienes nada serio con nadie.

Asentí lentamente. Estoy intentando convivir con Wanda, ya que... Finalmente, ella intenta explicarme y yo quiero dejar de sentir el odio que siento, sigo pensando como antes. La culpo por todo, absolutamente por todo, confío más en Peter que en ella y definitivamente quiero que me de mi espacio, pero debo convivir con ella por mis hijos, y esa es la razón por la que intentaré llevar todo en paz. No significa que la he perdonado, ella me pone de cabeza... Pero no voy a dejárselo fácil, no puedo...

-No me lo hagas tan difícil. - Dije rápidamente. - Han pasado tantos años que ya ni siquiera recuerdo tus defectos... - Suspiré y la mesera nos dejó el café en la mesa acompañado de donas.

-Tengo muchos defectos, puedo recordartelos si gustas. - Comenzó ella y asentí lentamente creyendo que se trataba de una broma - Soy insegura, muchas veces impulsiva, y siempre pongo a la gente que amo por delante de mí. Lo último no es tan así como un defecto, pero casi, ya que muchas veces proyecto lo que creo que será mejor para ellos y casi siempre tengo razón, pero en otras ocasiones no, y por querer hacer lo correcto lastimo a quienes amo.

La observé y pude notar el arrepentimiento en su rostro. Suspiré apartando la mirada.

-Ya los recordé... - Murmuré recordando como cada vez que yo le decía que dejara a su familia resolver sus problemas solos, ella... Simplemente no podía evitar involucrarse. - Aún así nunca me gustaste poco.

-¿Y ahora te gusto menos por eso? - Preguntó bebiendo de su café con deseo. Ella realmente ama el café como si fuese la última gota de agua en el desierto.

-No, no me gustas menos. - Dije rápidamente. - Pero te odio lo suficiente como para quererte lejos. - Admití y ella asintió lentamente.

-Lo comprendo. - Murmuró tomando una dona y dejándola en mi plato. - Tu favorita, sé que siempre pides esa.

Sonreí.

-¿Te lo dijeron ellos? - Pregunté señalando a los guardaespaldas y Wanda asintió.

-Sí, suelo hablar directamente con ellos para saber de ti o de mi hijo. - Murmuró. - Información directa es gracias a Clint y Yelena.

-Sí, ayer antes de irse me dijeron. - Murmuró. - Tuvimos una plática larga y entendí las razones que tuvieron para ocultarme... Todo ésto.

-Es bueno saber que no te enojaste con ellos. - Dijo rápidamente. - Me alegra saber que han podido arreglarlo.

Asentí lentamente.

-¿Te quedarás mucho? - Pregunté cambiando de tema antes de volverlo incómodo.

-No, lo que tu puedas tenerme en tu casa y ya. Luego me iré para no incomodar, deberíamos hablar sobre nuestros gemelos.

-¿Gemelos? - Pregunté con una sonrisa entristecida. - Se siente extraño volver a hablar de dos... Me acostumbré a que duela saber que uno estaba muerto por mi culpa.

-Natasha, linda. - Dijo rápidamente. - Lo siento, tendrás todo el tiempo del mundo junto a Tommy, lo prometo.

Agradezco muchísimo la manera en la que Wanda intentaba  hacerme sentir, sin embargo... Me cuesta aún, me cuesta demasiado. Estoy intentando que ella no me moleste y sigo lanzando comentarios hirientes tratando de que ella sienta siquiera el cinco por ciento del todo el dolor que yo sentí.

No puedo amar y odiar tanto a alguien... No me gusta sentirme así de confundida, ayer por la noche no dejaba de llorar y la quería a mi lado abrazándome... Quería sentirla en la cama junto a mí, quería reponer todos éstos estúpidos años perdidos, pero no... Luego desperté y la odié, quería que estuviese muerta, se lo comenté a Peter, él me ayudó a intentar comprender a Wanda... Luego volví a odiarla en cuanto apareció en la cocina, no puedo hacer mucho más... Esto llevará tiempo. Peter me ha dicho que me relaje y que lo que tenga que ser será, y tiene razón.

-Gracias. Sólo quiero unos meses junto a mis hijos, te prometo que... Hablemos de... Compartir la crianza y...

-De momento es más seguro que los cuides tú. - Dijo rápidamente cortandome. - Yo no puedo cuidar bien de Tommy, y... Lo intento, sin embargo ambas sabemos que no me criaron de la mejor forma... Crecí prácticamente en un ejército, y... Sé que tú le harás mejor, debo dejar éste empleo y para eso debo atrapar a... A... Bueno, ya sabes. - Suspiró. - Luego de eso intentaré quemar la información y reingresarnos en el sistema, a Tommy y a mí. Como si nada hubiese pasado, mis jefes harán eso.

-¿Estaremos casadas otra vez? - Pregunté angustiada.

-No te preocupes... - Murmuró observando hacía otro lado. - Te daré papeles de divorcio para firmar y todo bien, serás una divorciada. Eso explicaría la repentina aparición de Tommy, y ya.

-Quedaré como la peor madre del mundo si todos creen que mi ex y yo separamos a nuestros hijos en un arrebato demente porque ya no nos amábamos... - Suspiré angustiada. - ¿Sabes lo que dirán de mí?

-¿En qué momento comenzó a importarte lo que decían de ti, Nat? Cuando nos conocimos tú eras tan libre y yo era una aburrida de mierda.

La observé molesta. Yo sé que me volvió tan aprensiva...

-¿Sabes en qué momento me volví así? - Pregunté molesta. - Cuando el amor de mi vida murió en un accidente de auto. Cuando secuestraron a mi hijo pequeño asesinandolo... Cuando lloré diez años por ambos sintiéndome la única culpable.

Wanda me observó en silencio.

-Se me quitó el hambre, te espero en el auto. - Murmuré molesta.

-Uh, Nat. - Me detuvo y yo me giré esperando sus súplicas que iba a rechazar. - Las llaves.

Me entregó las llaves del auto y siguió comienzo su dona. Salí algo avergonzada...

Tal vez si esperaba súplicas.

Nota de autor:

¡Hey! ¿Cómo va la tarde?

Leí que a muchos les está gustando gemelos, no pude contestar los comentarios aún, pero los amé, en un rato lo hago. Les comento que creo que tanto gemelos como desobediencia van a ser ff largos, así que... ¿Qué opinan de sufrir más? Ahre.

-Codex.