toma mi mano | jenlisa

Capítulo 38

Esto no es incómodo, para nada... Jennie dice en su mente al darle otro trago a su vino. Aquello, por supuesto, fue dicho con todo el sarcasmo humanamente posible.

Rosé se aclara la garganta, y todos la miran, sorprendidos. Jennie está bastante segura de que ninguna persona la esperaba aquí para que fuera la gracia de la noche. Piensa que incluso Rosé no espera serlo. Y aún así es quien hace el intento de seguir con la conversación. "Me gustaría agradecerte por organizar esto, Lisa," dice, viéndola. "Me alegra que estemos haciendo esto."

"Siempre has sido muy buena mintiendo," Lucas murmura dentro de su vaso. Optó por beber agua hoy, lo cual Jennie no pudo evitar notar. Se pregunta qué significa. ¿Es porque él no quiere montar una escena? ¿O es porque él no quiere bajar su guardia estando cerca de ella?

Jennie debería dejar de ser tan paranoica.

Lisa deja la mirada fija en su hermano, inmutable. "Luc," dice, muy apenas, y Jennie siente que su estómago se revuelve con temor. Si hubiera tiempo de usar la frase 'catástrofe inminente', sería ahora.

Por el momento, que Lucas estallara era algo esperado. Es por eso que, cuando él solo suspira y habla en voz calma, Jennie se asombra. "Sabes que esto no está funcionando," él dice. Jennie de algún modo está dispuesta a darle la razón. "Estás incómoda, Rosé está incómoda, yo estoy sumamente avergonzado, y Jennie está aterrada."

Jennie parpadea. "No estoy aterrada," protesta. Lucas solo ladea la cabeza, estudiándola.

"Claro," él dice, con lentitud.

"Ahora solo estás tratando de intimidarme a propósito. No es justo."

Para su sorpresa, él se recarga en la silla, dejando que se le escape una sonrisilla. "Ah. Ahí está la Jennie Kim que conozco y..." se calla, encogiéndose de hombros. "... conozco."

El rostro de Lisa se vuelve sombrío, y Jennie de inmediato coloca su mano encima de la de ella antes de que tenga la oportunidad de atacar a su hermano. Definitivamente no quiere presenciar otra disputa de estos hermanos. Eso, y las palabras de Lucas fueron dichas en broma. Hay una primera vez para todo, Jennie supone.

Ella solo le da una mirada al hombre.

"Si vienes a mí con un problema," Rosé dice, "también espero escuchar una solución. ¿O ya lo olvidaste?"

"Oh, yo tengo una," Lucas dice, echando un vistazo por toda la mesa. "Necesitamos discutirlo a fondo en lugar de fracasar tratando de tener una charla amena. No estoy aquí para barrer debajo de la alfombra. Estoy aquí para responsabilizarme de lo que hice."

"Quizá tú y yo deberíamos tener una conversación privada antes de... esto," Jennie sugiere, insegura. Él niega con la cabeza.

"Nunca aceptarías reunirte conmigo." La expresión de Jennie debió haberla traicionado al ofenderse, porque él se apresura a dar una explicación. "No estoy diciendo que te daría miedo. De hecho, no creo eso. Solo sé que no confías en mí lo suficiente."

Confianza. Esa es prácticamente la temática de su vida entera, al parecer. No puede discutirle eso a él.

"Mira." Lucas está concentrado. Determinado. "Seré honesto. Yo tampoco confío en ti. Aún no. No estoy seguro de si alguna vez lo haré, y creo que tú entiendes eso." Jennie sí lo entiende. Además de ella lastimando a la persona que él probablemente más ama en este mundo, la relación de ella con Lisa casi le cuesta a él su relación con su hermana. "Pero confío en mi hermana, y eso es algo que debería haber estado haciendo todo este tiempo. Quién sabe," le muestra una sonrisa irónica, "tal vez, si yo no la hubiese regañado tanto por estar contigo la primera vez, ella no hubiese sido tan insistente al querer confiar ciegamente en ti."