Mi Dulce Karma

capitulo 18

Daniel...

He decidido invitar a Naye a una plaza para relajarnos un poco, hoy por fin es sábado, así que tomo mi celular y le marco.

-Bueno.-Contesta al cabo de unos segundos.

-Hola amor, ¿tienes planes hoy?.-Contesté.

-No para nada, ¿qué planeas?.-Preguntó curiosa.

-Quería que saliéramos a dar un paseo a la plaza, esa que tanto te gusta.

-¿De verdad? Si, claro.-Noté la alegría que le daba.

-Bien, entonces paso por ti en una hora ¿de acuerdo?

-Si amor, nos vemos.-Dijo finalmente cortando la llamada.

**************

Al llegar a su fraccionamiento, estaciono el coche y me bajo para tocar el timbre de su casa. Pero antes de tocar, observo que un taxi se detiene y bajan dos personas de el, un hombre y una mujer de una edad media junto con unas maletas. El hombre agradece al taxi y se acercan a la casa.

-Buenas tardes.-Me saluda el hombre.

-Buenas....tardes.-Digo algo confundido.

-¡Ay caray! He olvidado las llaves mi vida.-Informó a la mujer.

-Entonces tócale a Nayeli.-Respondió la mujer.

Claro era evidente que tenían que ser los padres de Nayeli, ella me había comentado que habían salido de viaje, pero porque tenían que regresar justo en este momento. La mujer volteó a mirarme y yo solo pude sonreír.

-¿Se le ofrece algo jóven?.-Preguntó su madre. Antes de que pudiera responder, Nayeli abrió la puerta con una sonrisa en su rostro pero al ver a sus padres frente a la puerta, su sonrisa se borro. En seguida volteo a verme con expresión de ¿qué hacemos?

-¡Papás!.-Dijo Nayeli con poco entusiasmo.

-Hola hija.-Respondió la señora alegre.-Disculpe jóven ¿desea algo?.-Volvió a repetirme.

-Amm, les presento a Daniel, él es un amigo que conocí apenas en un nuevo curso de arte en el que me he metido.-Dijo Nayeli algo colorada.

-¿Curso de arte?.-Preguntó su padre

-Si, pero después les cuento, él me invitó a ver una exposición de arte contemporáneo, ¿si?

-No hija, acabamos de llegar, además esas exposiciones duran mucho tiempo, otro día irán, ¿por qué no pasan a comer? Preparare algo riquísimo.-Dijo su madre.-¿Qué dices Daniel? No piensas rechazarme ¿o si?

Miré rápidamente a Nayeli y ella hizo una expresión de "lo siento".

-No señora ¿cómo cree? Pasemos.-Dije con una sonrisa de nervios.

-Adelante.-Contestó su padre.

No quedó otra opción más que adentrarme a la casa de mi novia, con los nervios a flor de piel por miedo a que me reconocieran al ser su profesor.