Capitulo 29

3.5K 174 7
                                    

Daniel...

Hoy es la cena en casa de mis padres y aún no puedo creer que Nayeli este invitada. Digo no es que no quisiera invitarla, es solo que no quiero que se sienta extraña por estar en un lugar con todos bombardeándola de preguntas.

-¿Emocionado hermanito?.-Me codeo Naty.

-No sabes cuanto.-contesté sarcástico.

-¡Ash! que amargado. Ni porque estará tu novia en la cena.

-¿Qué se supone que les voy a decir a mis papás? ¿Qué salgo con mi alumna de 16 años?

-Y que se te derriten los ojos cuando la miras.-Contestó con una sonrisa.-¡Ay! Ya se nos ocurrirá algo en ese momento. Ahora conduce al departamento.

-Si, patrona.-Contesté arrancando el auto.

---------------------

Terminé el trabajo pendiente que me había llevado a casa. Me recosté un momento en el sillón analizando que se supone que diría. Era gracioso que hubiéramos pactado no decir nada a nadie pero se nos salía de las manos y parecía que estábamos ansiosos de que todo mundo se enterara sin siquiera estar conscientes. Antes de meterme a bañar, tomé mi celular y mandé un mensaje de texto.

Bonita paso por ti a las 8:00 pm. Espero estar a la altura de lo guapa que estarás hoy. Te veo en el parque cerca de tu casa, princesa.

Coloqué sobre la cama la ropa que me pondría esta ocasión. Naty quería verme "casual" pero puff por favor yo ya lo era. Me puse unos jeans, camisa gris con cuello en V y mi chamarra negra. Naty se adelanto a la casa, para ayudar con la comida o más bien pellizcar los platillos. Yo por mi parte, recogí el tiradero que ella había dejado en la sala, era bastante desordenada y vivir con ella unos meses va a ser un total lío. Al terminar cogí las llaves del auto, bajé a donde este se encontraba y me encamine al pequeño parque donde esperaría a Naye.

Al llegar estaba ahí ella, sentada en una banca, la palabra hermosa le quedaba corta. Tenía su cabello alaciado, y presumía un vestido color blanco un poco más arriba de las rodillas que dejaba a la vista unas bonitas piernas, llevaba unos tacones negros. Toda ella era hermosa. Bajé del auto para saludarla, frente a ella no pude resistir las ansias que me comían por dentro para probar esos labios suaves que me dejaban loco. La saludé con un beso tierno pero apasionado, tomándola de la cintura y apegándola a mi.

-Hola.-Dijo al término del beso.

-Hola. ¿Vamos amor?

Asintió. Le abrí la puerta para que tomara asiento, rodee el auto y tomé mi lugar.

(..............)

Cuando llegamos hasta la casa de mis padres. La ayudé a bajar del auto y tomándola por la cintura caminamos hasta la puerta.

-Amm Naye, si en algún momento te sientes incomoda y deseas irte, dímelo y pasare a dejarte ¿de acuerdo?

-Oye, respira.-Dijo muy tranquila.-Ya conociste a mis padres ahora me toca a mi.

Toqué el timbre y abrió Naty. Recibió a Naye con un beso en la mejilla y pasamos. Como era de esperar todos los que se encontraban en casa miraron detenidamente a Nayeli. Pensé que sería algo intimo pero me equivoqué y estaban primos, amigos de la familia, de Nataly, tíos, etc. Miré a Naty desesperado por un poco de ayuda.

-Familia.-Anuncio Naty.-Ella es Nayeli, es una amiga que conocí en Italia y es de aquí, así que regresamos juntas.

-Hola Naye.-Se acercó mi madre.-Soy Rosie, la madre de Naty y Dani. ¿Ya conocías a Daniel?.-Preguntó. Pero por supuesto que iba a preguntar si llegamos juntos y yo aun la tenía tomada por la cintura.

Mi Dulce KarmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora