Mi Dulce Karma

Capitulo 57

Daniel...
-Eres un maldito infeliz.-me soltó un golpe el padre de Nayeli.
Ella trataba de calmarlo y apartarlo pero él seguía repartiendo golpes de los que algunos no pude esquivar.
-¡BASTA!-gritaba Nayeli.
Estábamos en problemas...

Dos horas antes...

Melissa no se había presentado en mi vida desde aquél momento en la cafetería, Nayeli me dio una oportunidad más y ambos prometimos que todo nos lo contaríamos.
Era viernes, y habíamos decidido salir a pasear después de que terminarán las clases. Faltaban dos horas para terminar la jornada.

-Profesor Daniel, la directora lo necesita en su oficina.-era un alumno
-Gracias.-me levanté para ir a su oficina y ver que necesitaba. Toqué la puerta.
-Adelante.-contestaron.

Al entrar Nayeli estaba sentada en una silla frente al escritorio.

-Tome asiento profesor.-dijo señalando la silla.-He recibido información de que existe una relación entre ustedes dos ¿es eso cierto?

¿cómo se pudo haber enterado? Está vez éramos más discretos. No sabía que contestar, Nayeli no me miraba y jugaba con sus manos, cuando estaba muy nerviosa siempre hacia eso.

-No directora.-sostuve firmemente.
-He llamado ya a los padres de la alumna.
-No hay razón.-habló Nayeli.
-¿Cómo pueden ocultar algo así?-se levantó y de su cajón sacó un sobre.-Son fotos, no pueden ocultarlo, no puede mentirme profesor. Pensé que era un hombre íntegro.

Los padres de Nayeli llegaron en seguida.
-Lo que voy a decirles es demasiado fuerte.-comentaba la directora.
-¿Qué ha pasado?-preguntaba la.madre.
-¿Qué hace él aquí?-preguntó su padre
-Él es el profesor de inglés de Nayeli.-dijo la directora.-Mantienen una relación amorosa.

-Eres un maldito infeliz.-me soltó un golpe el padre de Nayeli.
Ella trataba de calmarlo y apartarlo pero él seguía repartiendo golpes de los que algunos no pude esquivar.
-¡BASTA!-gritaba Nayeli.

El señor se calmo y de mi labio corría un hilo de sangre
-He recibido estás fotos.-las mostró, éramos Nayeli y yo basándonos. Pero no dentro de la escuela, fue en un paseo que dimos, a un parque al que la llevé.

Su madre comenzó a llorar. Nayeli se colocó a mi lado, su padre la apartó.

-Te voy a denunciar y perderás tú trabajo idiota.-repetía su padre enojado.
-¿Desde cuando llevan esto?-interfirió la directora.
-8 meses.-dijo Nayeli
-Maldita sea, maldita sea.-repetía su padre caminando de un lado a otro.
-Salgan, ambos.-dijo la directora a Naye y a mi.

Salimos se la oficina y estando afuera, sostuve su mano.
-¿Quién pudo haberlas mandado?.-sollozaba
-Quisiera saberlo.

Llegó un mensaje a mi teléfono de quién menos hubiera querido.

Le advertí a la estúpida que te dejara en paz, ahora tú también serás perjudicado.
-Melissa

De modo que ella había mandado las fotos, Nayeli leyó el mensaje y su tristeza se convirtió en enojo.

-A veces desearía huir, y olvidarme sólo unos días de todo esto.
-Vámonos unos días.-propuse
-¿A dónde?.-preguntó
-Déjame encargarme de eso.

Sin pensarlo más, dejamos a todos dentro de esa oficina, salimos y subimos a mi auto...