Capitulo 24

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Nayeli...

-¿Qué creen chavas?.-Anunció Ana llegando a la cafetería con nosotras.

-¿Qué pasó?.-Respondió Em con la boca llena.

-Vi al profe de Ingles con Vanessa, y se veían muy pegaditos.

En ese momento juro que se me quitó el hambre, y no podía creer lo que Ana estaba diciendo. Ella no era mentirosa y por supuesto que le creía, además compartiendo dos años con Vanessa no eran en vano. La conocía lo bastante bien como para saber cuales eran sus intenciones con Daniel.

-¿Y qué fue lo que hiciste?.-Pregunté curiosa a Ana.

-Pues le dije que se anduviera con cuidado con ella, por supuesto. Me parece que él es bastante bueno como para no involucrarse con una alumna.

Y fue ese comentario el que hizo que me ahogara con el trago de jugo.

Comencé a toser y Mich me palmeaba la espalda.

-¿Estas bien?.-Preguntó Michelle.

-Si, no pasa nada.-Dije recuperándome.

-Bueno como sea no creo que sea asunto nuestro si el profe se quiere involucrar con Vanessa.-Comentó Emily.

-Supongo.-Dijo Mich.-Bueno este fin de semana mi madre va a hacerle una comida a mi abuelita y quería saber si querían acompañarme porque la verdad no quiero ser la única aburrida ahí.

-Creí que estarían tus primos.-Dijo Ana.

-Créeme, si conocieras a sus primos, estarías pidiendo lo mismo. Le tienen envidia.-Contesté yo, ya que la mayoría del tiempo, sus tíos me invitaban a sus reuniones familiares.

-¿Entonces qué dicen?

-Pues yo digo que si voy.-Respondió Ana.

-Yo igual.-Dije.-Pero mándame un mensaje con la hora ¿va?

-Yo igual voy.-Dijo Em.

-De acuerdo. Yo les mando decir la hora.

-Bueno, entonces vamos a clases y nos vemos a la salida, para ir platicando.-Comentó Em.

(..........)

Al llegar a mi siguiente clase, no paraba de pensar en lo que Ana había dicho, al analizarlo mejor ¿por qué estaba yo tan segura de que Daniel no jugaba con las personas? No lo conocía lo bastante bien y si se pudo fijar en mi ¿Quién decía que no se podía fijar en otra alumna? Vanessa era muy bonita, popular, delgada, entre más cosas, lo único que la arruinaba era su mala actitud y lo bastante coqueta que era, por no decir otras cosas.

-Hey señorita Nayelli.-Dijo el profesor de química agitando su mano en frente de mi rostro.-¿Esta usted poniendo atención?

-Lo siento profesor, no lo escuché.

-Pues no me sorprende, ha estado muy distraída últimamente. Sean los problemas que sean, déjelos fuera de esta aula.-Dijo girando en dirección a la pizarra.-Ahora bien clase, abran su libro en la página 78.

Tenía razón el profesor, últimamente me estaba concentrando más en Daniel y ese es un problema, he sido una alumna de buen rendimiento, y no por estar de romance con él, iba a descuidar mis estudios, ya tendría tiempo para pensar sobre ello en casa.

(.......)

Mi clase de Algebra había terminado 15 minutos antes, o más bien era yo quien había salido antes, la profesora nos pidió que resolviéramos un ejercicio y quien fuera terminando podía ir saliendo.

Así que esperé a las chicas en la entrada, sentada en una banca cerca de ahí, con mis audífonos y la música puesta. No había alumnos, pero no tardaban en salir todos de sus respectivas clases. Cuando escuchaba música solía perderme, y noté que alguien tomaba lugar a lado mío. Al echar un vistazo vi que era Daniel.

Me quite los audífonos, y paré la música.

-Hola.-Dijo él.

-Ah hola.-Dije cortante.

-¿Te pasa algo?

-No, nada.

-Iba para mi casa y al verte aquí se me ocurrió que podía invitarte a algún lugar.

-No, gracias. Estoy esperando a mis amigas.-Contesté

¿Pero que me ocurría? No quería estar tan cortante con él, ni siquiera sabía que estaba enojada con él pero al verlo ahí junto a mi me sentí frustrada. Las preguntas que me había hecho en la clase de Química junto con lo que había comentado Ana me hacían sentir entre molesta y triste.

-¿Te contó Ana lo de la sala de maestros?.-Preguntó tomándome de la mano.

En cuanto sentí el contacto de su mano con la mía, la retiré y no porque no quisiera tomarla, si no porque los alumnos comenzaban a salir y él no se había dado cuenta.

-¿Pero qué te...-Antes de que terminara, llegó Michelle corriendo hacia nosotros.

-Profe, que amable en hacerle compañía en lo que salíamos.

-Ah, si este mmm.-Dijo mirándome a mi primero y luego a Michelle.-No quería que se quedara sola, así que me quede platicando con ella, pero ya llegaron, así que aquí ya no hago falta.-Dijo dedicando una sonrisa nerviosa a Mich.

Yo solo podía mirar hacia otro lugar. Posé mi vista en frente y Emily y Ana ya estaban cerca. Al llegar ahí a la banca, me levanté. Se podía notar que Daniel se sentía incómodo.

-Muy bien chicas, me retiro.-Anunció tomando su portafolio.

Se acercó a mi, y me dio un beso en la mejilla, ocasionando que me pusiera roja.

Todas me miraron con una sonrisa divertida, ya que fui la única de la que se despidió con un beso.

-Con que si ¿eh?.-Dijo Michelle y soltó una pequeña risa.





Mi Dulce KarmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora