Capitulo 27

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Daniel...

Los rayos del sol invaden mi habitación y me pegan directo en la cara...¿En qué momento deje abierta la cortina?

-Mueve las piernas bello durmiente.-Escucho decir a una mujer de voz tierna.

-¿Nayeli?.-Digo entre sueños.

-¿Nayeli? ¿Quién es esa?.-Dice con una sonrisa.

-Ah lo olvide. ¿Quién más podría tener llave del departamento si no es mi fastidiosa hermana?.

-Ja, fastidiosa. Yo no lo soy.-Dijo lanzándome una almohada a la cara.-Vamos Dani, levanta. Mamá me dijo que tenías trabajo.

-Ya voy, solo 5 minutos. ¿Cuándo regresaste de Italia?

-Hoy, tonto. Esperaba una bienvenida y lo olvidaste.

-Lo siento, he estado ocupado con papeles del colegio y eso.-Dije excusándome.

-Ay aja. Y con esa Nayeli ¿cierto?.-Preguntó.

No quería contestar a eso así que la evadí con otra respuesta.-Ya, ve a preparar el desayuno, yo voy a bañarme.

Ella abandonó la habitación y yo tomé mis cosas para dirigirme al colegio, esta vez elegí ponerme un traje con una corbata color negro. Salí al comedor y ya estaba puesta la mesa, mi hermana me había preparado un huevo estrellado y un jugo.

Me senté a desayunar con ella, tenía el tiempo justo para salir, durante el desayuno conversamos un poco, sobre sus estudios allá, sus amores, entres otras cosas, ella y yo somos muy unidos, ya que solo es dos años más chica que yo y nos entendemos muy bien.

-Bueno, tengo que irme tonta.-Dije. Típico amor de hermanos.

-De acuerdo bobo, con cuidado, te quiero.-Dijo con una sonrisa.-Acomodaré mis maletas en la otra habitación.

-¿Cuánto tiempo te quedarás?

-El tiempo que tarde en conseguir un depa.

-OK. Me voy.-Dije y cerré la puerta.

(..............)

Llegué al estacionamiento, me bajé del auto y tomé camino al aula de clases que me correspondía.

El grupo con el que tenía clase, era muy calmado, así que la mañana marchaba bastante tranquila. Pero últimamente me molestaba pasar todo el tiempo encerrado mientras los alumnos realizaban sus ejercicios sin ninguna duda aparente, así que pedí de favor a un alumno que se encargara mientras salía por unos papeles. Lo cual era mentira.

Al ir caminando por el pasillo para ir a la sala de maestros, pase por el aula donde estaba Nayeli, tan bonita sentada en la segunda fila, escribiendo, pero noté que no eran apuntes porque en seguida pasaba un trozo de papel a Michelle. Quería hablar con ella, no había podido resolver el asunto de Vanessa.

Toqué la puerta suavemente y la maestra me atendió gentilmente.

-¿Qué ocurre Daniel?.-Dijo alegre.

-Tenía una duda con un trabajo con Nayeli y quería ver si me la permitías unos minutos.

Su mirada se encontró con la mía y me dedicó una media sonrisa.

-Nayeli puedes salir, el maestro Daniel te necesita.

Se levanto de la silla y se acerco hasta mi.

-Gracias maestra.-Dije amablemente.

-No hay porque Dani.-Contestó.

Caminé por el pasillo, seguido de Nayeli. Al llegar a sala de maestros la tomé de la mano. Me tomé ese atrevimiento porque sabía que durante la primera hora, ningún maestro venía aquí.

Mi Dulce KarmaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora