✁・・・Pedido por: una-pendeja-otaku-bb 🌟
Atsushi quería desaparecer de la vista pública, y en un intento de hacer su deseo realidad se hundía poco a poco en el asiento de la casi vacía cafetería. Recordaba con vergüenza la primera vez que conoció a (TN); venía de regreso a la agencia, estaba pajareando en su mundo cuando chocó con una pila de cajas andante justo en la entrada del local. Fue avispado para atrapar a tiempo la caja de cartón que estaba por colicionar contra el suelo, entonces vio el rostro de la joven que se veía ligeramente sorprendida por el accidente. En ese momento Atsushi se ofreció para cargar la mitad de las cajas que llevaba, ella aceptó seguido de un "gracias", y no volvió a pronunciar palabra hasta que llegaron a la oficina del presidente Fukuzawa.
Una palabra fue suficiente para congelarlo en sus pasos.
—Padre, he traído lo que pidió.
Ahora el peligris se encontraba en la cafetería recordando ese día de junio. La muchacha nunca fue muy expresiva, a veces pareciera que siempre tuviera sueño y hacía las cosas a su propio ritmo, ambos eran polos opuestos en energía, y como dicen por ahí, los contrarios se atraen, y así fue como pasó poco después de conocerse.
Atsushi no sabía qué pensaba la chica cuando pasaban tiempo juntos por alguna cuestión de trabajo o meramente ratos libres, pero no cabía duda que, aunque fueran silencios largos por parte de la muchacha, no eran incómodos. Sin embargo, no se atrevía en lo más mínimo hacerle saber sus florecientes sentimientos, no quería incomodarla, además de que no sabía cómo acercarsele en ese sentido.
—Solo tómala de las manos, mírala directamente a los ojos, se sonrojará, te lo aseguro, y en ese momento dile lo que sientes. Luego pídele un suicidio doble. No hay fallo, si fuera una chica caería rendida a tus pies si hicieras eso —comentó Dazai bebiendo un poco de lo que había pedido.
Atsushi alzó una ceja inseguro de lo que acababa de escuchar. La primera parte podría funcionar hasta cierta extención, pero el resto era un rotundo 'no'.
—Yo no soy parte de esta conversación —mencionó Ranpo al ser objeto de la atención del de cabellos grisáseos comiendo aún más de las chuches que había comprado.
—Disculpa que me entrometa —comentó la mesera dejando el pedido de Atsushi en la mesa—. Pero la menera más fácil de llegar al corazón de una mujer es simplemente declarandote de la mejor manera que solo tú sabes. Después de todo, como ella gusta de ti también estoy segura que la conmoverás.
Puso su amistad en restrospectiva. Las palabras de la castaña tenían total sentido, algo altamente estrafalario podría asustarla tomando en cuenta su naturaleza callada, y quería evitar agobiarla a toda costa. Se dio cuenta de que la respuesta estuvo en él desde el inicio.
El momento era indicado. Ranpo y Kunikida habían salido, Yosano estaba en su oficina, y el resto no estaban en ningún lugar donde poder verlos. (TN) estaba sentada en frente de su escritorio distraída con la mente enfocada en la laptop frente a ella.
Atsushi respiró hondo cuando aún no hacia su presencia notar. Sostuvo con un mejor agarre la caja rosada de mediano tamaño que llevaba. Su contenido se limitaba a unas deliciosas galletas de sueabe textura con chispas de cremoso chocolate.
—(TN)...
La voz del peligris salió gentil, llamando la atención de la muchacha que miró por encima de su pantalla sin expresión en particular, ya acostumbrada a que el chico la llamara.
—Te traje esto —Atsushi le hizo entrega del regalo, se sorprendió a sí mismo de que en vez de sonar nervioso, sonara como si fuera cualquier otro momento en el que fueran a verse como normalmente hacían.
—Muchas gracias -respondió la chica a la par que recibía la caja rosada.
El peligris tragó saliva, apretó sus manos en un puño y finalmente decidió hablar sus pensamientos al mismo tiempo que su subconsciente reproducía en silencio los consejos que le habían dado sus compañeros.
—(TN), yo--
—Lo sé —le interrumpió—. Dazai me lo contó —Atsushi se quedó pasmado sin habla—. Lo único que no entiendo es por qué tardar tanto, supondría que estabas al tanto de mis sentimientos por ti.
La joven se levantó de su asiento y se plantó justo enfrente del muchacho. El peligris se sonrojó débilmente, en ese momento la chica desvió la mirada, como si estuviera esperando una acción de su parte o como si quisiera decir algo que no se atrevía a dejar escapar de su pecho. Atsushi se sobó la mejilla derecha, su labio inferior comenzaba a temblar un poco, afortunadamente esto pasó desapercibido para la joven.
—¡Atsushi! —la puerta se abrió de imprevisto dejando ver a Ranpo—. Andando, hay trabajo qué hacer.
El chico previamente mencionado movía su cabeza entre (TN) y Ranpo, no quería dejar el asunto a medias, pero claro estaba que tampoco podía negarse en ir con su superior. De la nada sintió como la mano de la muchacha agarraba la suya, apretándola con ligereza en un intento de reconfortarlo. Atsushi le sonrió y ella correspondió el gesto. Ya que regresara estaba seguro de que diría todo lo que no pudo decir en ese momento.
ღ ¡Gracias por sus comentarios y votos! ღ
Publicación: dic. 05, 2021
ESTÁS LEYENDO
LෆVE TRIP ──Anime One-Shots
Fanfiction¡Pequeñas historias con tus personajes favoritos de distintos animes! (xLectora ♀) ✓500k: 5 de junio, 2020. ✓1M: 14 de abril, 2021. Los animes y personajes no me pertenecen. Créditos a sus respectivos mangakas/creadores. 🚫 Está PROHIBIDO resubir m...