FUEGO +18 [2] ✓ [Borrador]

23° Tú huella al caminar

Arabella

- No lo aceptaré como para casarnos de una vez pero lo tomaré como un compromiso de reconquistación Akem - declino - Tú me conoces a mí pero en mi mente yo no a ti, puede que algunas de nuestras conversaciones hagan ruido a mis pocos recuerdos pero eso no quiere decir que esté enamorada de ti, por lo menos aún no en mi actual vida. - intenta contraatacar pero lo interrumpo - Dijiste que irías a terapia por mí así que espero que lo cumplas. Me complaces en todo, puedo notar en tus iris grises un torbellino de pasiones al solo mirarme, tú corazón se abraza con el mío al juntarnos. Eres mi escudo y yo la guerrera que ataca con sudor y sangre pero necesitas ayuda porque en un ataque de celos me puedes perder y para siempre - se le tensa la mandíbula - seamos unos amantes aventureros donde las experiencias hablen por si sola, donde en cada una te conozca más porque te apuesto que la yo de antes no vivió esta nueva prueba de hoy - niega - dale tiempo al tiempo que todo llega a su momento ¿Qué pronto quedaré viuda?. Maravillosa noticia pero antes necesito darle al privilegiado Owen Laurent donde más le duele y es el escándalo del espectáculo luego de eso puedes hacer y deshacer con él a tú antojo.

- ¿Tú crees que a este frío corazón no sufre al no poder ser mía como se debe? ¿Crees que no me jode que lleves el Laurent y no el Ivanova?. Algo que si podiste notar durante estos siete días es que no actúo por inercia sino con la cabeza fría, pero aún así me provoca matar a todos esos hijos de la grandísima puta con un solo disparo y acabar con su patética vida. - no puedo descifrar su forma de mirarme. - ¿Aún no te enamoras de mí? Perfecto porque así podré enamorarte los 365 días del año, Arabella sé que conmigo haz despertado sentimientos y recuerdos fugaces que al lado de esos malditos pirañas. Iré a terapia por ti, por nuestros hijos y por mi; seamos esos amantes aventureros que no pudimos ser antes, seamos esos amantes locos que goza la vida al máximo. Arabella Duarte ¿Me acompañarías a caminar de mi mano y vivir nuevas experiencias junto a nuestros hijos?.

Una sonrisa se forma en mi rostro, mi corazón bombea con mucha fluidez. Mi respiración se va cortando en segundos.

- ¡Si!. Acepto a ser tú compañera de aventuras - me coloca el anillo en mi dedo y me besa con ternura, con una delicadeza jamás vista en él. Como si yo fuera de cristal que con un movimiento en falso me romperé.

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Camino sin ningún rumbo, paredes con grandes grietas las decora, un pasillo oscuro se asoma. De mi mano de repente aparece una linterna que al encenderla murciélagos me atacan incontables veces; corro por ese pasillo desesperada.

¿Dónde están todos?.

Al llegar al final de ese tenebroso pasillo tres puertas aparecen en mi visión donde cada una tiene una letra "R. H. V". No se cual escoger pero de un momento a otro mi piel se me pone de gallina al presenciar una sombra, el ambiente se torna frío mientras que mi corazón se me quiere salir del pecho. Es tanto el miedo que siento que me voy por la tercer letra "V", todo está en absoluto silencio a medida que avanzo la dulce voz de Kaem inunda mis cinco sentidos. A pasos largos persigo su voz.

- ¡Mami! ¡Mami! - se oye desesperado.

Mi sentido protector de madre se activa de inmediato, intento abrir las puertas que se encuentran en los laterales y no se quieren abrir.

- Estoy aquí corazón - digo con un nudo en la garganta - mami siempre estará para ti y para tu hermanita.

Una detonación hace que me pare en seco. Quiero gritar, correr, ir por mis hijos pero mi cuerpo no responde.