━━𝙎𝙊𝙐𝙇𝙈𝘼𝙏𝙀; 𝘩𝘦𝘳𝘮𝘪𝘰𝘯𝘦 𝘨𝘳𝘢𝘯𝘨𝘦𝘳

Muñeca corsé: Parte II

Aunque Hermione no escuchó el enfado de Crookshanks la noche anterior, no había forma de evitarlo por la mañana. Incluso si puso su alarma para despertarla, no había necesidad de tal cosa. Crookshanks saltó sobre su cama y comenzó a moverse con ira. Hermione se despertó con una sacudida, gritando y agitándose mientras trataba de quitarse el gordo gato de encima. Saltó de su cama y corrió a la sala de estar, escalando la torre de su gato y escondiéndose en la réplica del castillo con ojos enojados.

"¡Gato loco! ¿Qué te pasa ?" Ella gritó aturdida. La mujer resopló y se sentó de su cama. Una mirada a su reloj le dijo que todavía tenía una buena hora antes de que tuviera que levantarse y empezar a leer. Ella se dejó caer y colocó su brazo sobre los ojos. "Urgh, ¿de verdad Crooks? No hay forma de que me vuelva a dormir ahora ".

Para cuando se acomodara, su alarma estaría sonando para que se levantara una vez más y eso no era con lo que quería lidiar esta mañana cuando ya sabía qué día estaba a punto de tener.

Hoy, su primera clase fue química con el profesor Snape.

Y Ron .

Hasta el día de hoy sigue siendo un misterio para ella cómo el hombre pudo ingresar al curso. Sabía que él no era un idiota, pero Snape era una amenaza en un buen día cuando se trataba de su carga de trabajo. Permitir que Ron entrara tantas semanas fue nada menos que un milagro. O el hecho de que Harry solía compartir sus notas con él.

Y Harry obtuvo la mayoría de sus notas de ella .

El despecho en su corazón quería cortar la cadena por completo, pero sabía que nunca podría hacerle eso a Harry cuando sabía lo mucho que el hombre estaba luchando con la escuela y haciendo malabares con dos trabajos. Necesitaba pasar y Hermione sabía que le rompería el corazón si le permitía quedarse atrás para molestar a Ron. Aún así, no quería ver al hombre hoy y estaba recelosa de ir a clase después de la locura que sucedió ayer.

Hablando de dicha locura ...

Ella se volteó.

...

"No. No, no , no , no ". Dijo, saliendo de la cama y cruzando la habitación.

La cara sonriente de Bellatrix la estaba mirando todo el tiempo, burlándose de su miedo con dientes afilados y brillantes.

Hermione no se divirtió en lo más mínimo. Ella estaba aterrorizada . Y por una buena razón.

Porque a menos que Crookshanks creciera en manos de repente, o algún bicho raro se hubiera colado en su estudio en la oscuridad de la noche, estaba cien por ciento segura de que su muñeca estaba encantada.

Bellatrix estaba sentada en la cama de nuevo, desabrochada de las mantas con las que prácticamente la había asfixiado.

¿Y el libro?

Bueno, lo que quedaba estaba esparcido por su cama en páginas hechas jirones, un marcador abierto sobre la almohada donde una vez estuvo la muñeca. Al otro lado de ellos, escrito en lo que probablemente era la peor cursiva que había visto, había un mensaje corto.

Despierta, despierta, despiertame también

No tenía idea de lo que significaba, pero tampoco estaba lista para averiguarlo. Frunció el ceño a la muñeca y la señaló con manos temblorosas. "Te llevaré de regreso a Narcissa justo después de clase". Prometió Hermione.

La muñeca no hizo nada.

Nunca pareció hacerlo, pero estaba bastante segura de que podría hacerlo.

Hermione se acercó a ella con precaución y la recogió. Bellatrix se dejó caer flácida en sus brazos, y ninguna cantidad de suave sacudida o empujoncito la haría hacer otra cosa.