Te encontré en el infierno.

El amor es sacrificio.

Desde que me desperté esta mañana supe que este seria un mal día.

Tenia un vacío en el estómago y no podía echarle la culpa a este enamoramiento que me tiene medio trastornada.

Es normal que estés nerviosa, me dije, hoy es la gran pelea de Dani y la tensión con Coco que ni siquiera me dirige la palabra no ayuda nada.

Me despierto al alba y ya no soy capaz de volver a dormirme.

Tengo frío y tiemblo, no se si de angustia o de frío.

De repente noto un cuerpo cálido que se desliza bajo mis sabanas y se pega a mi haciéndome entrar en calor como por arte de magia.

Dejo escapar un pequeño gemido de gusto.

- Shhhhh, calla, solo quería hacerte entrar en calor, estabas tiritando.

- Tu siempre me calientas osea, no quería decir eso- me tapo la cara y él ahoga una carcajada en mi espalda.- quiero decir que siempre estas caliente...no en "ese" sentido....que también.

- Para! O despertaré a Coco con mis carcajadas, a parte de preciosa eres graciosa, cómo puedo tener tanta suerte?!

- Eso digo yo!- me doy la vuelta para mirarle a la cara, me besa y me pego más a él- vaya suerte la tuya! Y cuando recupere mi vida habrás dado el braguetazo!!! - me río pero de repente él se pone serio.

- No digas eso- deshace el abrazo e incluso intenta salir de la cama.

- No te vayas, aún tengo frío.

- De acuerdo, pero no nombres "tu vida" ni hables de dinero.

- Porque? Con dinero todo es más fácil, Dani, ya lo verás.

- Para nosotros no... Cuando recuperes "tu vida" saldrás de la mía.

- Ni lo sueñes...- me pongo encima de el y susurro sobre su boca- no te vas a librar tan fácilmente de mi- me muevo y ronroneo sobre él y se pone tenso.

- Me voy a mi cama antes de que sea demasiado tarde...

- Noooo, te prometo que no haré ruido...

De acuerdo, el día empezó bien, muy bien en realidad... Pero lo importante es cómo acaba, no cómo empieza.

Primero le supliqué que no peleara, tenia un mal presentimiento, demasiado dinero, había algo raro.

Por supuesto no me hizo caso, todo lo que tiene de guapo lo tiene de cabezota.

- Mira que como te rompan los dientes me desenamoro, EH?

- Casi me convences! - se ríe, me besa. No parece preocupado pero eso no me tranquiliza.

- Voy a ir con vosotros.

- Creí que no te gustaba verme pelear.

- Y no me gusta, lo odio! Pero si me quedo aquí sin saber lo que está pasando me volveré loca!

- No puedes venir, te olvidas de que te están buscando?

- No! Me pondré una gorra de Coco, no creo que me vayan a buscar en una pelea clandestina! O voy contigo o te juro...- me cierra la boca con un beso, esto empieza a convertirse en una costumbre... Odio que me callen! Aunque lo de los besos no está nada mal...

- De acuerdo... Aunque espero que tu amigo el pijo no esté.

- Fede no me delatará, ya lo hubiera hecho...o es que estas celoso?

- De ese monigote? Si, seguro!

Ninguno de los tres abre la boca en todo el trayecto hasta el lugar acordado.