Jungkook el chico tonto -Vkook

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Los modelos nuevos me miraban de reojo, algunos me sonreían de manera coqueta, era lo usual cuando se enteraban de que yo era el hijo del dueño. Por otro lado, Jin me estaba mirando intensamente, como si no tuviera otra cosa más interesante qué mirar, me examinaba de arriba hacia abajo.

Y me jode.

Tengo un fuerte dolor de cabeza desde ayer, que no ha parado y va a terminar consumiéndome. Tal vez... follar con Jungkook ha sido todo un error.

—¿Qué tal? —Jin se acercó hacia mí, y como si fuera uno más de sus conocidos me habló con confianza. ¿Sabrá que lo hice con Jungkook? Seguro que sí, por la manera en la que me mira, estoy seguro de que lo sabe todo.

—Bien.

El desfile de hoy mostrará al público el conjunto de pantalones free style con un toque fancy, así que tendríamos nuestros torsos al desnudo. Últimamente no me he ejercitado mucho, pero mi estómago está muy firme.Me deshice de la bata negra, esa, exclusiva para nuestra empresa y Jin me miró sin la menor vergüenza y comenzó a buscar algo sobre mi piel. ¿Qué mierda le pasa? ¡Nam hyung, ayuda!

—¿Cuándo se van a casar?

—¡¿Qué?!

En serio Jin más que cabrearme, me está asustado.

—Sí, tú y Jungkook. Hay muchos lugares en donde se pueden casar legalmente.

Iba a gritarle que se fuera muy lejos, pero Suzy apareció y comenzó a quejarse al verme la espalda.

—¿Qué te pasó en la espalda, Taehyung?

No entendía nada de lo que estaba hablando.

—Oh, ahí está. —Agregó Jin, viendo junto a Susy mi espalda. Qué mierda...

Umh.

Recordé que mientras Jungkook y yo lo hacíamos, él había clavado sus uñas en mi espalda. Cómo pude olvidarlo, no, mejor, cómo pude olvidar que tenía el desfile mientras me lo cogía. Este desfile era uno de los más importantes para mi padre y yo era el modelo estrella, cómo pude.

—Taehyung... ya te dije que tienes que cuidarte mucho antes de un desfile.

—Suzy yo...

—No pongas excusas, dijiste lo mismo cuando sucedió lo de tu nariz. Esta será la última vez que lo dejo pasar, ¿dónde está tu asistente?

—No... pudo venir.

—Bien, hablo en serio Taehyung. Iré por maquillaje.

Suzy se fue por el pasillo con una expresión molesta. Jin cruzó sus brazos sobre su pecho y me miró, esperando una respuesta, yo no quería ni dirigirle la palabra. Ya tenía bastante con mis propias dudas y confusiones, como para andar discutiendo con él.

—Taehyung, ¿dónde está Jungkook?

—No pudo venir.

—¿Por qué?Qué te importa.

—¿Namjoon sabe que le recomiendas lencería a hombres?

Jin pellizcó mi brazo y yo chillé en voz alta. Todos nos estaban mirando.

—No te quieras pasar de listo, te conozco lo suficiente como para saber qué tipo de chico eres.

—¿Y qué tipo de chico soy según tú?

—¿Realmente quieres saberlo? Tal vez gritas como niñita.

—Jin, escucha. Aléjate de mis asuntos y de mí, gracias.

—No me interesas, no creo que podamos llevarnos bien tampoco, pero yo aprecio a Jungkook y lastimosamente él está enamorado de ti.

—Ajá, y te gusta, ¿no? ¡Namjoon hyuuuuung!

Jin cubrió mis labios con sus manos.

—¿Qué estás diciendo? Jungkook es como mi hermanito y Namjoon lo sabe, así que si quieres pasarte listo con él, te juro que voy matarte, Kim Taehyung.

Jin me liberó cuando Suzy entró al lugar con una gran bolsa de maquillaje.

Joder contigo, Jin.

—

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