Y el día llegó.
La hora del almuerzo y la aparición mágica de la psicóloga, asustó a las chicas.
—¿De donde salió?.— Jennie estaba incrédula, esa mujer era mágica. La psicóloga se acercó a Lisa para decir algo, desatando los celos de Jennie.
Lisa corrió emocionada hacia sus amigas, mostrando un papel de color morado donde la letra de JiSoo se encontraba plasmada, con lindas palabras hacías su amiga, su prima y su novia.
—dice novia.— señalo Jennie con asombro.— Rosé, dime que no estoy leyendo mal.
La pequeña Rosé se encontraba apuntó de las lágrimas, a eso se refería JiSoo cuando dijo “Si, aceptó”
Aun atónitas y en busca de respuestas, decidieron esperar hasta que la noche cayera y los padres de Jennie salieran a hacer compras del mes. En cuanto la puerta fue cerrada, comenzaron a buscar en cada parte de la casa, sin encontrar nada.
—no pensé que esta casa fueran tan grande.— exclamó Jennie cansada.
—vives aquí y no sabias, imagina nosotras.
—en mi defensa solo llevamos unos meses en esta casa.
—esas son excusas, eres solo una niña caprichosa que entra y sale de su cuarto sin ver nada más.
—Lisa, cállate la boca. No es tu problema lo que haga o no.
—no se porque te molestas, solo hable con ella y deberías ser agradecida...
Rosé las observaba con cansancio, habían pasado todo el día en discusiones por algo pequeño. Al oir una puerta abrirse Rosé quedó helada.
—Jennie.. ¿Estamos las tres en casa?.— la mayor la observo con enojo.
—es obvio, mis padres salieron.
—¿Existe probabilidad de que las puertas se habrán solas?
—para nada, todas tiene seguro y la casa no está desnivelada.
—pero... ¿Existe la posibilidad de que algo se meta a la casa y nos pueda matar?.— Lisa pregunto mirando un punto fijo, Jennie asintió cansada de preguntas extrañas.
—pues bien, creo que eso nos va a matar.— señalo una sombra.
Rosé empezó a decir miles de oraciones. Hasta que aquella silueta fue tan conocida, que empezó a llorar.
—¡JiSoo!.— grito emocionada y corrió hacia aquel lugar. Ahora sus oraciones eran para no estar equivocada.
—hola, Rosé. Te extrañe mucho.— JiSoo abrazo a Rosé con fuerzas. Ninguna de las dos soporto las lágrimas.
—yo igual te extrañe.—Rosé sin dudarlo unió sus labios con los de JiSoo. Ya eran novias y no está mal ¿Verdad?
—¡No sean así! Inviten.— grito Lisa al borde de las lágrimas y empujando a Rosé para abrazar a JiSoo.
Las tres se abrazaron. Ellas sabían que el corazón de JiSoo jamás guardaría odio, menos con la persona que JiSoo más amaba.

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𝚁𝚄𝙻𝙴𝚂 ◌ 𝕮𝖍𝖆𝖊𝖘𝖔𝖔
Фанфик‧͙⁺˚*・༓☾𝘙𝘰𝘴𝘦 𝘦𝘴 𝘳𝘦𝘭𝘪𝘨𝘪𝘰𝘴𝘢. 𝘑𝘪𝘚𝘰𝘰 𝘵𝘢𝘮𝘣𝘪é𝘯 𝘦𝘴 𝘳𝘦𝘭𝘪𝘨𝘪𝘰𝘴𝘢. 𝘈 𝘙𝘰𝘴𝘦 𝘭𝘦 𝘨𝘶𝘴𝘵𝘢 𝘑𝘪𝘚𝘰𝘰 𝘺 𝘢 𝘑𝘪𝘚𝘰𝘰 𝘭𝘦 𝘨𝘶𝘴𝘵𝘢 𝘙𝘰𝘴𝘦. 𝘘𝘶𝘪𝘦𝘳𝘦𝘯 𝘷𝘪𝘷𝘪𝘳 𝘴𝘶 𝘢𝘮𝘰𝘳, 𝘢 𝘤𝘰𝘮𝘰 𝘥𝘦 𝘭𝘶𝘨𝘢𝘳.☽༓・*...