Capítulo 5

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Mi jefe y sus cambios de humor

Laila Black

Nueva York

La tarde paso algo extraña, Alexa no me dirigió la palabra en todo lo que restó del día y se la pasó encerrada en su habitación

Al caer la noche, Nedra hizo de cenar y fui al cuarto de Alexa para decirle que fuera a cenar, al llegar veo que tiene la puerta entreabierta

Me asomo un poco y la veo viendo un documental— Alexa, la cena ya está lista

—Si ya voy 

Salgo de la habitación y bajo las escaleras cuando veo al joven Grayson entrar

—Buenas noches joven

Sin siquiera voltea a verme cuando me contesta ya que estaba viendo su celular—Black

—La niña Alexa está a punto de bajar para cenar, ¿quiere que le diga a Nedra que le ponga un plato en la mesa?

—No, ahorita tengo que terminar unos asuntos importantes, dígale a Nedra que estaré en mi despacho y que me lleve la cena ahí— Dios, este tipo es una roca sin sentimientos

Debo hablar con él sobre lo que hablamos Kenna y yo la vez pasada, es mi oportunidad

—Me permite hablar con usted

—¿No es lo que está haciendo ahora?

—Me refiero en privado— por primera vez voltea a verme, dios, sus ojos eran tan claros y profundos lo cuál sentía como penetraba mi alma, inmediatamente siento como mis manos comenzaban a sudar un poco intimidada

—Vamos a mi oficina— asiento con la cabeza y caminamos en silencio para después entrar a la oficina— Dígame

Tomo aire antes de hablar—Por lo que he visto en Alexa estos pocos días que he estado con ella... Eh notado que le hace falta una figura paterna— Explico con cierto temor a cómo tomará a mal mi comentario

—¿Está diciendo que no soy su padre?— pregunta con sarcasmo alzando la ceja y yo rápidamente niego con la cabeza

—No no no, no es a lo que me refiero... —trato de decir, pero me interrumpe

—Hable con claridad Black, no me quite mi tiempo— se quita su saco dejando ver su camisa blanca con su corbata negra planchadas a la perfección y ajustándose increíblemente a su cuerpo 

Ay dios, ¿Desde cuándo comenzó a hacer calor?

Aclaro mi garganta—Usted es su padre, pero la mayor parte del día se la pasa en su trabajo, y creo que a ella le está afectando no tener un padre o una madre que esté para ella en la mayor parte del día

—Para eso la contraté a usted Black

Su seriedad me daba miedo

—Lo sé, pero aunque de mi mayor esfuerzo y ella me comience a tomar cariño... necesita a su padre, el amor de padre es algo que ninguna niñera va a cambiar— el solo me limita a ver, trato de descifrar su mirada pero no da ninguna muestra de sentimiento alguno— y también he visto que la niña no tiene una infancia normal, pienso que ha madurado muy rápido para su edad ya que lo único que puede ver son documentales

—Discúlpeme Black pero usted no va a venir a decirme cómo criar a mi hija— guarda silencio por unos segundos— ¿Tiene algo más que decir? Tengo cosas que hacer

Ok vamos al grano y sin rodeos— Su maestra de piano renunció y Alexa no deja que la de francés le de más de diez minutos de clase

—Bien, buscaré una maestra de piano y hablaré con la de frances

La Decisión CorrectaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora