La Decisión Correcta

Capitulo 26

Feliz cumpleaños

Laila Black

Nueva York

La escucho suspirar antes de contestarme— Abraham no va a venir a la fiesta...

—¿Qué? ¿Por qué no?

—Andrés le marcó a Azael, por lo visto sus socios le hicieron una reunión en un restaurant para festejarlo, y parece ser que no terminará hasta muy tarde, Andrés trato de convencerlo de que se fuera a casa pero Abraham al parecer estaba resentido de que nadie de su familia lo felicitara, así que su padre no quiso insistir más o echaría a perder la sorpresa

Suelto una maldición por lo bajo, toda esta semana planeando su fiesta para que al final no vaya, un maldito desperdicio de tiempo y esfuerzo

—Laila— Reconozco la voz al instante, era la de Alexa, pero sonaba entrecortada, como si hubiera estado llorando— Papá no va a venir

—Alexa no llores por favor, tu padre si va a ir, y de eso me encargo yo

—¿Como?

—Estoy cerca de su empresa, hablaré con él y lo convenceré de ir, ustedes cámbiense y espérenos ¿Ok?

—Ok

Cuelgo el celular y me subo a la camioneta marcando a otro numero

Voy a ir por el joven Abraham y lo llevaré a la fiesta a rastras si es necesario, así como que me llamo Laila Black Night

—Laila, que milagro que te acuerdas de mi— contestan del otro lado del celular

—Hola Kenna, necesito un enorme favor

—¿De qué trata?

—Necesito que me digas a qué lugar llevaron al joven Abraham para festejarlo

—No puedo darte esa información Laila, el joven se enojaría conmigo si se entera— No puedo evitar rodar los ojos

—Es urgente Kenna

La escucho soltar una risita— Es broma, ya te la estaba mandando mientras te decía que no podía dártela

—Gracias, hablamos luego

—Claro, ya ni me visitas y solo me hablas para pedirme favores, solo dime que ya no me quieres, juro que no me voy a ofend...

Le cuelgo a mitad de sus teatros dramáticos y manejo hacia donde era la dirección. Al llegar, quedo impresionada al ver el establecimiento, se veía muy lujoso a simple vista

Camino hacia la entrada pero un tipo de casi dos metros me impide el paso

—No puede entrar

—¿Por qué no?

—Necesita una invitación debido a que está todo el lugar reservado, aparte no cumple con el código de vestimenta requerido para hacerlo

Me detengo a ver mi vestimenta, traía unos jeans viejos, una playera oversize negra con un estampado de una banda que desconozco que en este punto estaba manchada de betún gracias a los mini cheesecake que prepare junto con Nedra

Ahora me arrepiento de usar mi ropa vieja para poder decorar y hacer las cosas más cómodamente, ya cuando acabáramos, me daría una ducha y me pondría una falda que había comprado hace un tiempo, aprovechando que en estas fechas, hacía más calor y no estábamos en el crudo invierno. Claro que no contemplaba estos imprevistos

—Solo tengo que hablar con alguien ahí adentro, no me tomará ni cinco minutos— pido nuevamente 

—No me haga perder mi tiempo y retírese