(Segunda parte)
Cosas de Chicos
Abraham Grayson
Nueva York
Silencio, solo había silencio, un rotundo, incómodo y matador silencio.
Desde que Alexa se fue al viaje con Adriana y Andrés, no había nada mas que silencio en esta casa tan enorme.
Me sirvo mi tercer vaso de whiskey al caer el mediodía, este maldito silencio en esta casa me está consumiendo y no quiero hacer nada más que encerrarme en esta puta oficina que no hace mas que traerme recuerdos de ella, de Black.
Dejo caer mi cabeza en mi escritorio mientras un fuerte zumbido suena en mi oído, me estaba matando desde hace quince minutos, no se si es por la borrachera que me puse ayer en mi habitación o porque ya me voy a morir y es San Pedro avisando que llegó mi hora.
El timbre de la casa me taladra los oídos como agujas.
—Callen esa maldita cosa— murmuro entre dientes.
Narrador omnisciente
Sasha abre la puerta de la casa encontrándose con los dos mejores amigos de su jefe y mejor amigo, algo desagradable teniendo en cuenta que uno de ellos era el chico por el cual había estado enamorada desde siempre y que hace mas de un mes le rompió el corazón.
—¿Que hacen aquí?— pregunta cruzándose de hombros tratando de sonar a la defensiva.
—Venimos a ver a Abraham— contesta Skay.
—No quiere ver a nadie, así a estado desde hace tiempo— responde la rubia con sequedad.
—Tranquila rubia, yo los invité— hablan a su espalda, voltea levemente encontrándose con el hermano mayor de los Grayson.
—¿Por que? Sabes que Abraham no quiere hablar con nadie.
—Y eso es algo que a mi no me importa, los traje con la estricta misión de animar a mi medio muerto hermano.
—¿Y por qué precisamente a ellos? No te caen bien y tu tampoco eres santo de su gracia precisamente.
—Les daré algo a cambio, así que por favor deja pasar a mis invitados.
La ojiverde sin mucha opción, se hace a un lado dejando pasar a ambos chicos.
—Vaya, hay mucha mala vibra en este lugar— comenta Daniel observando a su alrededor.
—¿Que les ofreciste?— pregunta la chica.
—A Daniel una cita con una amiga Rusa y a Skay, la oportunidad de hablar contigo— le contesta Alex con un toque burlón.
Sasha casi se le echa encima a golpearlo de no ser por que escucha la risa del ojiazul indicándole que es una broma.
—Claro que no tonta, simplemente les llamé para decirles que mi hermanito los necesitaba, que no estaba pasando por un mal momento.
—¿Tan malos amigos nos crees?— pregunta Daniel fingiendo indignación.
La chica prefiere ignorar aquel comentario y solo se enfoca con el pelinegro frente a ella—¿Por que quieres ayudarlo? No es algo muy común en ti.
Alex toma un aire mas serio y suelta un suspiro.
—Aunque no lo creas, me preocupo por él, esta vez quiero hacer las cosas bien.
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La Decisión Correcta
RomanceExisten ocasiones en que el destino te pone caminos en que no sabes que hacer, que pensar o como actuar Te pone en situaciones en que debes escoger cual es La Decisión Correcta