Tequila en Versos

Acostumbrarme a lo ordinario

Debo acostumbrarme a que en tu móvil me llamaré Daniel.
A que tus besos llevarán a otro corazón al cielo, tus labios darán redención a otros pecados y tu sexo despertará demonios en otro infierno ajeno al mío. Si, debo acostumbrarme a la vida sin ti, a despertar a media noche luego de una pesadilla y no buscar la paz jugando con tú pelo o dándote un beso en esa espalda que siempre dices que no te gusta pero que para mi siempre será el universo con tus lunares como galaxias. Debo acostumbrarme a lo ordinario, a recitar versos a musas que no valen un poema, a dejar esa tonta idea de una vida y volver a mis cuentos de una noche.
Acostumbrarme, acostumbrarme a reprimir las ganas de escribirte a penas abra los ojos y de buscarte cada noche. Se que no estarás para decirme que coma con tenedor en vez de cuchara, ya no me sacarás a bailar a mitad de la fiesta: ya no serás feliz conmigo.
Y sólo debo acostumbrarme amor(y de paso perder la costumbre de seguir llamándote amor), si, solo es acostumbrarse, sólo que hay hábitos que tardan varias vidas en perderse.
Si, creo que voy a olvidarte: pero empiezo mañana.