viviendo un sueño

capitulo nueve

31 de diciembre
Diciembre es la peor fecha para mí. De pequeña cuando nuestra familia era unida y feliz salíamos al jardín y mirábamos el cielo mientras este se iluminaba con los fuegos artificiales , de niña a esa edad pensaba que todo era perfecto amaba la Navidad y en mi inocencia pensaba que los regalos eran todo.

Ahora que crecí ahora que he pasado de tener todo a tener nada sé lo único que de verdad valía en ese momento era tenernos los unos a los otros. Ahora extraño esos momentos nuestra familia ya no es una familia solo quedan cenizas.

Ahora miro el cielo iluminado con lágrimas en mis ojos. Odio este vacío, odio este dolor, odio mi vida. Mirantras lloro solo puedo pensar en una persona, en Cameron, en cuanto lo quiero en una amor soñador no se parece en nada a lo que siento por caleb, porqué con Cameron es un amor sincero y aunque él diga que no se que también me ama.

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13 de junio .
Hoy cumplo años nuevamente y todo sigue igual. Nada ha cambiado , ni mi físico ni mis ganas de salir adelante. La vida no es como un libro romántico los cambios no suceden de la noche a la mañana. Tengo catorce deberia estar preocupándome por ser rebelde y disfrutar, debería estar pensando en chicos. No debería sufrir de esa manera, no debería sentirme tan vacía pero lo hago.

Debería dejar a caleb, ya he entendido que soy la otra, la amante la escondida y también he entendido que no le amo, no como creí hacerlo lo que sentía por él era sólo un enamoramiento, lo que siento por Cameron es diferente e intenso y quiero creer que él también me ama. Pero soy una cobarde y no dejare a caleb y nunca le contaré a Cameron que le amo muchísimo.

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Mamá me compró una torta. Todos vinieron a verme. Andrea, Cameron e incluso caleb. Sebastián, mamá e incluso papá que se vistió y baño para la ocasión. Me cantaron el feliz cumpleaños y quise sentirme feliz, agradecida pero no pude. No me es suficiente necesito mas pero no se que es ese mas.
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Teresa me sonrio y me acerco ella nada más verme para abrazarme. Natalia podía pensar que nadie la quería pero su familia la quería. Su madre, su hermano y de una manera un poco extraña su padre. Había empezado a comprenderla un poco más no comprendía sus ideas yo hubiera actuado totalmente distinto aunque si, podía entenderla sofia era su enemiga. Yo era la enemiga de muchos en mi escuela y no quería pensar en lo que mis insultos le causaban.

Conocía muy poco a Teresa, al parecer natalia no tenía una buena comunicación con ella aún no había llegado a entender por completo su historia solo que había quedado embarazada de sebastian a los trece y luego se metió con Arturo quien le dio estudios y juntos se crearon un nombre. Por una mala inversión de arturo todo se fue a la mierda y quedaron sin nada. ¿Pero... es esa la verdadera razón por la que ellos no estaban juntos?. No conocía para nada el amor no de un hombre hacia una mujer y viceversa yo solo conocía el amor hacia mi madre y azucena. Mi madre me había dado una gran lección sin quisiera querer dármela.

Los hombres son traidores, te prometen el cielo y las estrellas y cuando le das lo que quieren o obtienen de ti lo que ellos desean te desechan. Entonces porqué amar, para que decidir sufrir por un infeliz.

Decidi ser yo quien obteniera de ellos lo que quisiera y luego desecharlo. En los planes de mi vida no estaba amar, no en el cuerpo de Alice y mucho menos en el cuerpo de natalia.
- ¿por qué sigues con él?- pregunté mirando sus ojos - si eres infeliz no deberías dejarlo y buscar tu felicidad.

-no puedo dejarlo. Se lo debo, él me salvo - aparto el cabello de mi rostro -gracias a él no me converti en una descarada.

-pero no le amas ¿o si? - no respondió -sé que tu crees que no entiendo las cosas, créeme lo hago. Se que él no te ama y que tu amas alguien más- se mostró sorprendida - los escuche ese día en la cocina.