Aisha
Entramos al club sin hacer fila, los encargados ya me conocen al igual que a Dimitri y Arsen, nos pasan a la zona de nuestra reservación y ahí ordenamos unas botellas. Dimitri no se despega de mi lado y sé que debería de parecerme mal que el este intentando marcar territorio, pero me pasa todo lo contrario, en realidad me gusta y me excita que quiera tomarme como suya, aunque eso sea algo que nuca le dire.
Tomo asiento en el regazo de Dimitri cuando se pone en uno de los sofás y Arsen toma asiento en otro, Dimitri me aprieta más a su cuerpo cuando ve como los demás hombres de la zona me observan y aprieta mi muslo con una mano.
— Hoy andas muy posesivo — le digo pasando mis manos por su cabello.
— Solo les dejo claro quien tiene la fortuna de poder tocarte — dice mientras pasa su nariz por mi cuello — cierro mis ojos para disfrutar de la sensación que me brinda.
Vuelvo a abrir mis ojos y es cuando veo que Dey y Nick están entrando a la zona de la reservación, Kurt y William también van llegando y después veo a mis amigos de la central de Alemania y los de la central de USA.
Hace unos días les dije que vinieran para que estuvieran presentes cuando dejaba la organización, habíamos pospuesto un poco la ceremonia hasta darnos cuenta de que ya habían pasado unas semanas, todos ellos están de mi lado, unos más metidos que otros en la mafia, pero al final todos corruptos, lo cierto es que somos poco los infiltrados a comparación de los que no son corruptos, pero nosotros estuvimos y estamos en cargos más altos que ellos, por lo tanto la organización nos pertenece y si bien han logrado "interferir" en algunas de las movidas de las mafias es porque lo queremos, no porque hagan un buen trabajo.
Todos se acercan a saludarme de lejos a excepción de Johnson, que me hace levantarme del regazo de Dimitri para darme un abrazo, a Dimitri no parece agradarle mucho la idea de que me él me cargue y de una vuelta emocionado, pero su expresión se relaja cuando Jonhson se sienta y Mery se sienta sobre él, yo vuelvo a sentarme en las piernas de Dimitri y le voy un casto beso.
— Quita ese ceño fruncido — le digo acariciando su nuca.
— Yo no tengo en ceño fruncido — dice haciendo berrinche como si fuera un niño chiquito.
— Claro que si ¿Acaso tienes celos? — digo burlándome de él.
— Si los tengo, me dan celos de pensar que alguien más pueda probarte y tocarte.
— Tenemos un acuerdo, somos exclusivos hasta que ambos decidamos que ya no, así que no te preocupes — le digo volviendo a besarlo.
Estamos conviviendo entre todos, Dimitri comienza a adaptarse con mis amigos y todo nos burlamos de como tenemos todo bajo nuestro control, no necesitamos restregárselo en la cara a nadie, pero es muy divertido saber que lo tenemos.
— ¿No vas a tomar Aisha? — me pregunta Sam — Nunca te había visto sin tomar estando en un club — comenta extrañado.
— No me apetece — contesto yo.
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Sádica y trastornada
Teen FictionEl diablo un día fue un ángel, pero cuando las circunstancias lo ameritan ese ángel puede volverse el diablo, así como unos simples niños pueden volverse demonios. La vida le dio tantos golpes que la dejo trastornada y envuelta en un sadismo que int...