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Jughead tenía horas esperando a Mario, su guardaespaldas, para que le dijera cómo iba Betty.

Éste llegó en el auto y cuando estacionó, bajó del vehículo y fue hacia Jughead, quien lo esperaba fuera de la mansión.

—¿Y qué pasó?— Preguntó el ojiazul.

—Los llevé a la secundaria pero su chica prefirió quedarse en el auto mientras su tío iba por sus papeles. Después los llevé al aeropuerto. No quería preocuparlo, pero Elizabeth no dejó de llorar en silencio en todo el camino hasta el aeropuerto — Informó Mario.

Jughead suspiró. —¿Y cómo la trató ese tipo?—

—Fue atento, respetuoso y comprensivo con ella, señor — Le contestó.

— ¿Seguro? ¿No notaste nada raro?— Preguntó Jughead.

Mario negó. —No señor—

— Genial. Gracias Mario— Agradeció el ojiazul.

Éste asintió y se retiró, y Jughead entró a su gran y solitaria mansión, ahora sin la energía y presencia de la rubia. Ahora si se sentía solo y aburrido, además de preocupado. Se sentó en uno de los sofás de la sala y su mente empezó a revivir algunos de los momentos que había tenido al lado de la rubia.

Flashbacks.

Él la miró y puso una mano en su mejilla. Ambos sonreían mientras se miraban. Y sin saber cómo, Betty simplemente se dejó llevar y se alzó un poco, poniéndose de puntitas, y besó suavemente los labios del ojiazul.

Definitivamente lo tomó por sorpresa. Ella no tenía mucha experiencia en besar y él no sabía cómo reaccionar ante este gesto, por lo que se separó.

—Betty, ¿Que acabas de hacer?— Preguntó Jughead mirándola fijamente.

Ella se puso nerviosa y bajó la mirada. —Yo... yo... lo siento. Es que...

—Tranquila. No pasó nada. Pero quiero que me expliques qué es lo que acabas de hacer—

Betty tomó aire. —Es que yo... yo... creo... creo que tú... me... me gustas— Admitió sin mirarlo a los ojos.

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—Betty, ¿Que hiciste? ¿Acaso tomaste alcohol?— Preguntó Jughead acercándose a ella, serio.

— ¡Llegaste Juggie!— Chilló Betty poniéndose de pie y tambaleándose.

—¿Acaso estás ebria?— Preguntó Jughead tomándola en sus brazos para evitar que se caiga.

—¿Que es ebria?— Preguntó Betty soltando una risa.

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—¿Donde aprendiste eso?— Preguntó Jughead divertido aun agitado.

—Solo quise hacerlo— Respondió mirándolo a los ojos. —Te amo papi—

— Te amo pequeña — Le respondió.

Fin de los flashbacks.

Recuerdos como estos seguían llegando a su mente y solo podía pensar en cómo la estaría pasando ella en este momento.

—¿Está bien?— Le preguntó Lucía sentándose a su lado.

Jughead la miró, saliendo de su trance, y suspiró sacando su celular y mirando la pantalla. —No lo sé. ¿Por qué no me ha escrito? ¿Debería llamarla? ¿Crees que ese hombre le halla hecho algo?—

Rescatar Tu Corazón •Bughead• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora