Cada segundo transcurrido incrementaba el agobio y enfado de la cazadora que, sin importar cuantas cadenas fuera capaz de esquivar y cortar, el número de ellas no se permitía disminuir, pareciendo multiplicar su cantidad y dureza ante cada ataque. Detrás suya, el de gabardina blanca se mantenía evadiendo y protegiéndose de los intentos de captura, encontrando la inquietud de percibir en su propio cuerpo la fatiga por el esfuerzo, sumado al hecho de no haber tenido oportunidad de descanso luego de su largo viaje.
Destellos, cortes, traqueteos y quejidos darían melodía a la escena, dejando en segundo plano los gritos y pedidos de ayuda de otros combatientes que intentaba, sin resultado favorable, liberar a todos aquellos usuarios que ya habían sido tomados por las capsulas; enfrentamiento en contra de las serpientes metálicas y las criaturas de brea cuyos cuerpos devoraban toda arma que intentase atacarlos. La posibilidad de victoria era cada vez menos visible.
La mayor de las inquietudes, ante los ojos de la mujer en ferviente combate, se dividiría en dos caminos, el principal de ellos el estado de su familia, no preocupándose en extremo por su pareja, el habilidoso e ingenioso elfo que, no dudaba, recibiría la ayuda necesaria por el de ojos bicolor. Por otra parte, sus pequeños, también hábiles y preparados encontrarían la manera de preservar su seguridad, contando con la ayuda de aquel ser de figura cambiante en quien depositaba la mayor de sus confianzas en aquellos momentos de caos, Arkan. Su instinto maternal y de pareja conflictuaba con su historial como combatiente, el cual, se mantenía en desesperante estado de alerta al divisar que la silueta enmascarada, causante de aquel desastre en el que se encontraba, únicamente había necesitado levantar una de sus manos para otorgar una de las más cansadas batallas a la mujer, regresando a un porte firme y atento como espectador mientras la cazadora y su aliado danzaban en maniobras expertas la lucha por su libertad y victoria.
Diversidad de elementos en los cuales pensar mientras el cuerpo, guiado por los más primarios instintos de supervivencia, respondía manteniendo los saltos y giros necesarios para evitar ser herido, blandiendo la cuchilla con el más firme y fuerte agarre para quebrar los eslabones pertenecientes a las ya incalculables cadenas.
Una serie de destellos que viajaron por su visión periférica pretendieron impactar en contra de la figura enmascarada, ocasionando el levantar de una molesta nube de polvo que dificultó la visión de la cazadora, obligándole a retroceder y alcanzar la posición de combate de Vipmon, quien fuera el causante de los ataques.
— Eso no funcionara —Advirtió, con voz entrecortada y cuerpo jadeante, Kia, continuando su interminable misión de cortar y apartar aquellos molestos apéndices, manteniendo atención en los movimientos ahora lentos del varón; ambos estaban agotados.
— Tenía que intentarlo, estas cosas no se detendrán a menos que su controlador sea detenido —Alegó, mostrando un ceño fruncido de descontento cuando la nube de polvo se desvaneció, revelando la figuran aun firme e inmutable del ser enmascarado.
Aquel sería el punto culminante en la paciencia del varón, enfrentar una desgracia que conllevó a perder un día de viaje, encarar lo que debió ser la conversación más incomoda pero sincera con la cazadora y deber enfrentar a unos bastardos que no encontraron mejor momento para decidir atacar que el en evento esperado no solo por él, Arkan y Brell, sino de todos aquellos que depositaron sus confianzas en ellos tres para crecer y mejorar sus habilidades, estudiantes pertenecientes a distintas razas, regiones, costumbres e intereses que ahora eran victimas de una batalla por la supervivencia y libertad, encontrando que sus esfuerzos solo valían para retrasar un aparente final inevitable de captura y desaparición dentro de capsulas metálicas.
No sé trataba de si mismo, sino de luchar por todos aquellos que se aferraban a desgastar hasta la más pequeña porción de su poder para resistir dentro de una contienda sin aparente final.
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Onirkos
FantasíaLos estragos del pasado continúan resonando cual eco en la vida de aquellos que se adentraron a las tierras desconocidas, enfrentando los males impensables y escapado en los mares de la tristeza y la perdida; el tiempo a pasado y algunas cicatrices...