YoonGi amaba y adoraba a su grandiosa, extensa y súper normal familia.
Pero existían días en los que a esos ojetes les encantaba sacarlo de sus casillas.
Todo el mundo conocían las estupideces que acontecían a su amorosa familia.
Oh, que estrés era...
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YoonGi's pov
Trasladarse a la pequeña villa fue relativamente fácil, acomodamos a mi marido para que el viaje no fuese incómodo para él, para eso tuvimos que hacer unas maniobras, juntando algunos sillones y quitando otros logrando tener suficiente espacio.
Los niños como buenas garrapatitas que eran, permanecieron al lado de TaeHyung; ah, mi pobre príncipe encantador, se esforzaba en mostrar una sonrisa pero en el fondo no solamente estaba adolorido, se sentía preocupado.
No es que yo fuese un completo inútil que no pudiera hacer nada... Sí era inútil, pero tampoco lo era tanto, sin embargo los dos hemos hecho todo juntos desde que nos conocimos, cuando tuvimos a YeonJun fue un trabajo en equipo el lograr que nuestro primer cachorro llegase al tamaño que está ahora a sus nueve años. Con YeJi y HyunJin fue igual, eran tres niños y debíamos dividirnos para mantener nuestra atención en esas tres sabandijas inquietas.
Si estuviese en la situación de mi Alfa, me sentiría igual, no por desconfianza, sino porque sabemos lo complicado que es cuidar a tres cachorros, logramos hacerlo juntos... ¿Pero uno solo?
Entre mis pensamientos y una conversación negativa con mi otro yo, perdí la noción del tiempo pero mi cuerpo siguió actuando a voluntad, para cuando reaccioné gracias al apretón de Jackson, me percaté que mi Alfa ya estaba acomodado en la cama matrimonial, a su costado estaba el suero, sostenido a un tubito de metal que no sabía su nombre.
— Ay, Tae, lo importante es que estás bien, no te preocupes por YoonGi, nosotros le ayudaremos a mantener vivos a los niños. —El cobrizo desconcía si eso era algún tipo de dar apoyo, si era así, Jackson era malísimo en eso. YoonGi frunció su ceño golpeando el hombro del otro Alfa.
— Sé que estará bien. —Y ahí estaba de nuevo esa mirada del rubio, una mirada que parecía gritar la plena confianza que tenía en mí. Bajé la mirada para cubrir la sonrisa boba que quería aparecer sumado al calor en mis mejillas.
Vamos, YoonGi, llevas casado nueve años con TaeHyung, no actúes como un puberto, ya acostúmbrate.
— Jack, gracias por todo, deberías regresar con HoSeok, debe estar preocupado, me quedaré un poco más con ellos.
La voz de mi padre provocó que levantara la cabeza, se estaba despidiendo de Jackson, yo sólo alcancé a otorgarle unas palmadas en agradecimiento, para finalmente verlo alejarse de la habitación dejándonos con TaeHyung.
Papá caminó hacia mi Alfa para acariciar un poco su cabello, ví como TaeHyung cerraba los ojos por la caricia.
— ¿Qué es lo que sientes?
— No sabría decirlo, papá Min, me siento cansado... Pero a la vez tengo ánimos para hacer muchas cosas. —Dudábamos que su cuerpo le permitiese hacer esas cosas. Las pulgitas se mantuvieron a su lado, los mayores sostenían cada uno las manos de HyunJin, el inquieto niño que parecía morirse por subirse a la cama y acostarse con su pápa.
