Viendo nuestro pasado, presente y futuro ( Watching Kimetsu No Yaiba)

Capítulo 23: Violando las normas

Después de ese hermoso y emotivo reencuentro entre madre e hijo , se presentaron ante el patrón y líder de los pilares quien les saludó con una sonrisa y le explicaron que sabía ya ciertas cosas pero que no podía decirlas todavía. 

Ruka se sentó al lado de sus hijos con calma. Shinjuro los observó unos segundos de reojo con un ojo algo hinchado y una tirita por la mejilla tras ser algo curado por la Pilar del Insecto antes de apartarla soltando un pequeño suspiro, no merecía sentarse con su familia ni un beso en la mejilla de su esposa, no todavía. Debería esforzarse y trabajar duro para lograr la confianza y el perdón de su familia. No pensaba rendirse, ya no más. Esa llama debía volver a despertarla. 

-¡Es enorme!- dijeron impactados Takeo y Shigeru mirando la sala mientras sus padres ya estaban sentados delante con Kie sosteniendo al pequeño Rokuta en brazos que después de estar en brazos de su hermana mayor se había quedado dormido. 

-Lo es -dice Tanjuro con calma. 

-Vamos a seguir 

Los pequeños Kamado vieron asombrados como se encendía una especie de ventana de cristal negra de la que salieron imagenes que se movía. Parecía magia. 

Se vieron a niños jugando en la nieve tirándose bolas de nieve. Uno de los niños con cabello negro y ojos azules se acercó o lo intento para jugar pero se tropezó y cayó al suelo donde empezó a toser. 

-Pobre niño - dijo apenada Mitsuri 

-¿No se parece a alguien?- se pregunta pensativo el Pilar de la Serpiente 

-Es verdad, Obanai- dijeron varios de sus compañeros 

-¡Rui! ¡Rui!

-¿Quien es Rui?- pregunta Takeo 

-Parece que es ese niño - responde Hanako 

-Oh vaya 

-¡Rui! ¿Qué haces? ¡No puedes salir a la calle! 

-Debe ser un niño que era débil y estaba enfermo siempre- dijo con tristeza Tamayo.  

Yushiro no pudo evitar sentir algo de pena y empatía por ese niño, en eso le recordaba algo a él. 

Los pequeños Kamado casi se emocionaron mientras oían el opening donde se veía a muchos de la sala y sus hermanos mayores peleando contra los demonios. 

-¡El señor búho! ¡El señor búho en las sombras! - dijeron Takeo y Shigeru haciendo sonreír al pilar un poco. Esos niños eran adorables y le caían muy bien. Le recordaban a Senjuro. 

Tanjuro y Kie sonrieron con tristeza al ver todo lo que había tenido que pasar su hijo mayor mientras buscaba el modo de volver a Nezuko humana. Estaban orgullosos de él por ser un valiente guerrero y no rendirse nunca. Solo esperaban que pudiera lograrlo. 

-Capítulo 21: Violando las normas 

''Nací con el cuerpo muy débil. Nunca corría. Caminar ya me producía dolor. Hasta que apareció el señor Muzan''

-Es el malo de los malos- dijo enfadado Shigeru 

Tanjirou y Nezuko al ver de nuevo a Muzan volvieron a gruñir y apretar los dientes sobre todo el pelirrojo. Lo odiaban, jamás le perdonarían lo que le hicieron a su familia. 

-Pobre. Yo te salvaré. 

''Mis padres no se alegraron. Obtuve un cuerpo fuerte pero no podía salir a la luz del sol y tenía que devorar a humanos. 

-Lo convirtió en un monstruo devora humanos, ser malvado- dijo enfadada Kie. 

-Cuando uno está desesperado y quiere vivir hará cualquier cosa sin importar el precio a pagar- comenta pensativa Ruka- Es triste lo que le paso a ese niño. Lo engaño aprovechándose de su debilidad.