capítulo 41.

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— ¿Entonces te prepararás para esta noche, cariño? — comentó la señora Kim mientras lavaba los trastes

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— ¿Entonces te prepararás para esta noche, cariño? — comentó la señora Kim mientras lavaba los trastes.

— Fui convencido por Felix, no es como si tuviera algo mejor que hacer después de todo. — respondió desinteresado, mientras secaba los platos y los colocaba en la alacena.

— Me alegro que te animes a salir.— sonrió.

Unos insistentes toques en la puerta hizo que madre e hijo se miraran confundidos por unos instantes, ninguno esperaba visita.

— Voy yo. — dijo el pelimenta. Caminó con calma y abrió la puerta en su totalidad.

— ¡Querido! — exclamó Felix entrando rápidamente. Para luego analizarlo con la mirada de pies a cabeza. — ¿Qué haces en esas fachas aún?

Seungmin rodó los ojos mientras que el peliazul resoplaba cansado, dejando dos grandes bolsas en un sofá cercano.

— Vamos, tienes que bañarte y cambiarte. — aplaudía mientras empujaba a Seungmin a subir a su habitación.

— Hey, espera, ni siquiera sé que rayos haces acá tan temprano.

— ¿No es obvio? Voy a encargarme de tu imagen para esta noche, además no quiero arriesgarme a que te arrepientas.

Seungmin soltó un bufido ante la emoción palpable de su amigo.

— Hola Lix-ssi. — se encaminó la señora Min hacia los jóvenes.

— ¡Hola mamá! — exclamó feliz para luego dar un par de venias.

Porque de alguna manera Felix había tomado la confianza suficiente pero a la vez con debido respeto a la pareja Kim y, a ellos no parecía molestarles en absoluto.

— Me supongo que subirán a prepararse. ¿Verdad? — sonrió levemente.

— Sí, vino como un loco debido a eso. — se quejó el pálido chico.

— ¡Cierto! Nosotros nos vamos ya, bajamos luego. — habló Lee para recoger sus bolsas y subir detrás del pelimenta.

La señora Min sonreía ante la enérgica personalidad de Lix y el cómo su pequeño hijo le obedecía a regañadientes, como un par de hermanos en verdad.

— ¡Bien Seungmin! — exclamó ni bien ambos estuvieron en la habitación. Miró su reloj de muñeca. — Son exactamente las 3:50 de la tarde así que tenemos unas cuatro horas, ojalá y nos alcance. Traje una bolsa con todas mis cosas, la otra es tuya.

— ¿Bromeas? — dijo burlón. — En media hora me doy un baño y en otra media me cambio. Esto es ridículo — rodó los ojos. — Podemos alistarnos a las siete, quiero descansar ahora.

— No, ni se te ocurra — le advirtió —, la fiesta empieza a las ocho y media. ¿Qué tal si quedamos atrapados en el tráfico de la carretera? De ninguna manera. — agitó sus manos. — Así que... esta bolsa es tuya, ahí traje todo lo que preparé para ti — sonrió Felix, alzando dicho objeto. — Pero primero ve a ducharte — sacó con rapidez un polo y pantalón holgado y se lo entregó, abrió otro cajón y le tiró un bóxer que cayó en el rostro de Seungmin.

mi mejor amigo ✧ knowminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora