capítulo final

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Momo sonreía mientras conversaba con un par de amigas a su alrededor y, aunque no pareciera, estuvo totalmente pendiente de si Felix y los demás pasaban por la lujosa entrada

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Momo sonreía mientras conversaba con un par de amigas a su alrededor y, aunque no pareciera, estuvo totalmente pendiente de si Felix y los demás pasaban por la lujosa entrada.

Entre miradas breves dio con el momento exacto en el que la adorable pareja hacía acto de presencia.

— Disculpen, ya vuelvo pronto. — dijo con amabilidad para luego irse rápidamente.

— ¡Al fin llegan!

— ¡Hola Momo! — soltó Felix con emoción y Bang solo sonrió en gesto de amabilidad, estaba algo nervioso por conocer a más amigos de su lindo chico.

— Vamos, no hay tiempo que perder. — la pelinaranja se puso detrás de ambos y con sus manos empujó -sin algún tipo de fuerza exagerada- a los chicos. — Esa es su mesa. — indicó a los minutos de llegar — La reservé ya que está un poco alejada de los demás.

— Gracias, pero ahora — la miró fijamente. — debes explicarle a BangChan lo que deberá de hacer.

La mencionada suspiró con calma y con una sonrisa amable pidió que tomaran asiento. Siendo así la manera en que le dio a entender a BangChan todo lo que debía de hacer.

— Bueno, eso es todo, el plan es fácil. — concluyó Momo con seguridad y una sonrisa traviesa.

— ¿Creen que funcionará? — replicó Bang.

— Conozco a Minho lo suficiente como para asegurarte que sí. Solo relájate, la probabilidad que te dé un par de golpes es poca. Además, si eso pasa, podrás defenderte.

— Momo tiene razón, Channie. Solo ayúdanos, por favor. — hizo un tierno puchero el cual Bang no

demoró en dejar un corto beso.

— Está bien, lo haré.

— ¡Gracias! — sonrió. — Ahora iré a traer a Seungmin, no debe chocar con Minho, porque después el encuentro no será tan emocionante.

Por otro lado no muy lejos, iba el pelimenta buscando con tranquilidad a Momo mientras que se ganaba muchas miradas curiosas.

— Hey, Kim... hola. — dijo con energía un chico pelirrojo mientras le sonreía.

— Hola. — respondió tratando de ser cortés, no es como si conociera al chico frente suyo.

— Te ves muy bien esta noche.

— ¡Disculpen! — un voz algo aguda y agitada sonó. — Pero este precioso es mío. — sonrió Momo, para luego tomar de la muñeca al pálido chico. — Nos vemos, bye~.

Y con una sonrisa aún más amplia, se llevó a Seungmin. Dejando a aquel pelirrojo con el entrecejo levemente ceñido y las palabras incompletas en su boca.

Nadie podía arruinar el plan de Momo.

Nadie podía arruinar el plan de Momo

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mi mejor amigo ✧ knowminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora