capítulo 39.

508 54 13
                                    

— ¿Ya, Seung?

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

— ¿Ya, Seung?

— Te dije que no iré, no sigas insistiendo. — Seungmin se encontraba acurrucado entre sus sábanas, tenía pensado dormir un largo rato aprovechando que había hecho ya toda sus tareas.

La última semana había pasado tan rápido que los estudiantes no tuvieron tiempo de nada, otro semestre iba a concluir y se decía por ahí que si se veían malas calificaciones, tenían prohibido el ingreso a la fiesta por la primavera. Claro que eso a Seungmin no le importaba, él siempre buscaba obtener las mejores notas por propio deseo suyo. Gracias a ello tampoco pudo ver con frecuencia a Minho, de seguro que aquel chico estaba ocupado en presentar trabajos e informes, y estudiar para los exámenes de cada curso.

— No seas aburrido, por favor, por favor, por favor. — rogaba Felix en tono infantil.

Seungmin se sentó acomodando su espalda en la cabecera de su cama y lo miró fijamente — Hemos tenido una semana fatigante y llena de exámenes, proyectos por aquí y por allá. — resopló — ¿No crees que alguien como yo quiere descansar?

Lee rodó los ojos ante el comentario. — Sólo será un par de horas, además prometiste acompañarme — lo miró con ojos suplicantes —, por favor ~.

— Lix...

— Vamos~, será divertido. ¿No te parece genial cambiar de look? — le sonrió coquetamente. — Además mañana es la fiesta, debemos comprar algo de ropa o algún accesorio. Por favor~. — juntó sus manos como si fuera a rezar.

— No quiero ir, LixLix, prefiero descansar aquí, protegido y con el calor reconfortante de mi humilde cama — palmeó un par de veces la almohada que tenía al lado.

— ¡Yah~! — se quejó alzando por unos instantes sus brazos. — No seas perezoso. ¿Quién va acompañarme mañana? Sabes que no puedo hacer algo sin ti. — hizo un pequeño puchero.

— No eres un bebé. — respondió con rapidez.

— Y uno queriendo ser cursi. — dijo indignado.

Seungmin sonrió con burla.

— Vamos ya, hace tres días hice la reservación para un spa muy fino y elegante — alardeó haciendo que el castaño rodara los ojos. — Digno de ambos.

— Quiero seguir con este color, me niego a probar otro.

— ¿Y cuál es la diversión entonces?

— El de no quedarme calvo a temprana edad.

Felix chasqueó la lengua y se levantó de la silla giratoria del escritorio. — Ok, te espero en media hora abajo. Peínate y ponte otra polera si gustas. Tenemos una cita con el destino... destino que cambiará y mejorará nuestra apariencia. Así es.

— No tienes remedio. — dijo en voz alta viendo como su amigo salía de la habitación.

— Si no bajas en medio hora me enfadaré mucho. — gritó desde las escaleras.

mi mejor amigo ✧ knowminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora