𝅄 ໒ Gator in luv | Monty x Freddy ⌑ Fnaf ഒ ˚ ₊

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-¿¡Me estás diciendo que todo esto fue porque te metiste en una estúpida pelea!? Freddy, eso no es algo que tú suelas hacer, estoy segura de que hay una explicación lógica para esto ¿Con quién fue?- Preguntó su amiga, la cuál acompañaba al castaño en su casa, pues le sorprendió ver que no fue a clases, entonces en cuanto estas terminaron, fue a verlo con suma preocupación, y ahora estaba en la casa del castaño, ambos se ubicaban en el enorme sofá.

-No sé, era un chico que no conocía, pero que comenzó a buscarme pelea.- Obviamente la albina no se creyó esto ¿Cómo iba a hacerlo? El chico era malísimo mintiendo, incluso si se estuvo pensando esa excusa por horas, sonaba como si fuera lo primero que le vino a la cabeza.

-¿Sabes? Curiosamente alguien más faltó a clases el día de hoy.- Chica arqueó una ceja y se cruzó de brazos.

-Sí, Chica, casi todos los días falta mínimo una persona, sería raro que fuese el único.- El castaño sonrió de forma calmada, sin embargo, su amiga no estaba conforme con esta respuesta.

-¡MontGomery no fue a clases! Freddy ¿Te metiste en una pelea con él?- ¿Cómo era posible? Bueno... Quizá no era nada bueno mintiendo ¿Pero cómo pudo intuirlo?

-No, a ver... Ese chico se salta clases cuando quiere ¿Podemos cambiar de tema, por favor?- Suplicó Freddy, luego ambos escucharon como alguien le bajaba al baño, segundos después vieron a Gregory salir de el mismo.

-¡Freddy! ¿Te metiste en una pelea? ¡Dime que ganaste y lo presumiré con todo mi salón!- Exclamó el niño, apretando sus puños con emoción.

-No... Nadie ganó, el conserje nos separó, e igualmente, eso no es algo de lo que uno deba enorgullecerse, superstar, mejor presume que tu hermano es el mejor de su clase y que formó parte del consejo estudiantil en casi todos los años que lleva ahí.- Mencionó el castaño, orgulloso de lo último, sin embargo, su hermanito solo rodó los ojos y tomó su celular.

-Y ahora ese mismo tipo está suspendido.- El infante le mostró su lengua a su hermano, quien frunció suavemente su ceño, marcando aún más esta acción cuando escuchó a su amiga reír un poco.

-Ya, chiquito... Es solo una semana ¿Sí? Pondré más atención a las clases solo para pasarte todo y que no te atrases.- El castaño tomó la blusa de su amiga y con una sonrisa radiante en su rostro asintió rápidamente, abrazando a la chica segundos después.

-¡Eres la mejor amiga que puede existir! ¡Gracias, gracias, gracias!- La de ojos azules solo rió y dejó algunas palmadas en la espalda del de ojos similares a los suyos.

-Venga, hombre... No es para tanto ¡Jeje!- Le dijo, pero Freddy ya estaba sollozando mientras le recalcaba lo mucho que la quería y lo buena amiga que era.

Ambos pasaron el día juntos, hicieron las tareas, aunque el trabajo fue más pesado para Fazbear, quien tuvo que pasar todos los apuntes del día a su cuaderno, Chica le ayudó, explicándole los temas nuevos, incluso el castaño fue regañado por la albina cuando no le ponía suficiente atención, fue como su maestra por un rato. Al concluir todo lo referente a la escuela, hicieron muchas cosas juntos, vieron una película e hicieron karaoke en la televisión del castaño, de esta manera descubrieron que Freddy tenía un talento oculto, el cuál era cantar, su voz dulce pero masculina se escuchaba muy bien entonando alguna canción. Chica ni siquiera lo intentaba, ella no cantaba ¡Ella gritaba! Por lo que al pasar las horas, la garganta de Chica terminó con la voz ronca.

-¿Quieres algo de miel con limón?- Ofreció Fazbear, viendo como ella asentía con la cabeza, sonriente a pesar del dolor de garganta. Freddy le sonrió de vuelta y caminó a la cocina, sirviendo un poco de miel en un plato y exprimiendo un limón sobre esta, próximo a esto revolvió con una cuchara ambas cosas, formando una mezcla homogénea.

Una vez hecho todo esto, le llevó el plato a la joven y se lo entregó, esta agradeció y comenzó a comer lentamente lo recién entregado. Pasados los minutos, a Chica ya se le escuchaba su voz más relajada, la miel sí le había ayudado.

-¡Muchas gracias por todo, Freddy! Me divertí mucho hoy, pero mi mamá me dijo que llegara antes de las siete, ya que va a salir a hacer unas compras y quiere que yo la acompañe, entonces... Nos vemos.- Explicó su amiga, la cuál guardó todas sus cosas en su bolso y lo colgó en su hombro, el adolescente escuchó atento, para luego asentir con una sonrisa.

-Claro, no te preocupes. Nos vemos otro día.- Se despidieron, y pronto Fazbear quedó solo, el contraste del ambiente era enorme, pasó a ser muy animado y alegre a más decaído, la visita de su amiga le había hecho olvidar todo y ahora que estaba solo había vuelto a la cruda realidad.

-Freddy, perdón por hablarte así hace rato, fuí malo, yo... ¿Quieres jugar videojuegos conmigo?- Escuchó esa voz aguda del infante, la cuál le hizo saber que no estaba completamente solo y lo hizo sonreír. Volteó a ver a su hermano, el cuál tenía dos controles en sus manos, y asintió con la cabeza.

-Claro, pero debes enseñarme primero ¿De acuerdo?- Su respuesta hizo saltar de alegría al pequeño, lo cuál llenó por completo su corazón, amaba tanto a su hermano, era él la estrella que lo iluminaba día a día, era la única familia que realmente tenía, pues sus padres ni siquiera se hacían presentes en casa mientras ellos estaban despiertos, al menos casi nunca, de vez en cuando llegaban de la nada, queriendo cumplir su papel de padres de repente, esto le molestaba mucho a Freddy.

-Freddy, puedo hacer que me suspendan también si quieres, así no tendrás que llevarme a la escuela y estar solo en casa.- Insinuó Gregory, mientras colocaba algún videojuego que el castaño evidentemente desconocía.

-No, estoy bien con llevarte a clases y estar solo en casa, superstar.- Contestó el de ojos azul marino, pasando su brazo alrededor de los hombros de su hermanito menor. El día no había sido tan malo después de todo.