FNAFHS REWRITTEN

Capítulo 26: Espero no se hayan drogado todos con las moritas del bosque...

(Capítulo de la serie: 27 // Título original: Enigmas y secretos)

Con la albina de pelo corto:

-¡Chicos! ¡Les traje regalitos!

Para su sorpresa, la mitad de su equipo no estaba. Bonnie era el único que seguía ahí, tirado en el suelo. Bon los seguía bien de lejos para no ser descubierto aunque para ella él nunca había llegado, y la pelirroja al parecer se había esfumado.

-Vaya... Creo que solo tu pudiste con el poder del bosque encantado. -Comentó.

Abby salió de detrás de un tronco.

-Oh. Retiro lo dicho jeje.

-Y dime... -Habló Abby hacia Bonnie. -¿Te gusta alguien? ¿Tienes a alguien especial?

-Tengo un gran amigo. O bueno, tenía... por alguna razón se enojó conmigo. Y no sé por qué. No sé si hice algo mal yo...

Bon, desde la distancia, podía oír lo que conversaban. Se sintió mal al oír que Bonnie se sentía culpable. Cuando el verdadero culpable era él mismo.

-Tomen. -Puppet les dio unos trozos de madera tallados a sus compañeros. -Hoy conocerán su conexión con la naturaleza. Traje para todos, pero por lo visto nuestro compañero nunca nos alcanzó. -Dejó la pequeña madera que era para Bon en el suelo. -Si la encuentra, mejor.

Cuando los chicos tomaron las tablillas, enseguida brillaron y soltaron una especie de energía que se materializó en seres los cuales Puppet llamó espirituales. Todos, Bon incluido, estaban asombrados de lo que veían.

-¡Wow! ¿Están viendo eso? -Exclamó Abby.

-¡Wow! -Dijo Bonnie con asombro.

-Bienvenidos al bosque encantado. -Dijo Puppet con una sonrisa gatuna.

Luego del espectáculo de magia y de que todos ya se hubieran ido, Bon también tomó su llave espiritual de madera y un conejo turquesa salió de ella, sorprendiéndolo. Menos mal sus compañeros no lo vieron. Comenzó a interactuar un poco con el animal pero se terminó perdiendo en el bosque.

-Abby: Que lástima que nos falte uno...

-Puppet: Recuerden. Lo mas importante es no separarse del grupo. En este bosque es fácil perderse.

La pobre albina terminó hablando en vano dado al cabo de un rato, todos salvo ella se habían perdido.

-Vaya, creo que no me escucharon. Al menos tienen a sus animales espirituales, por lo que creo que estarán bien.

Con Bon:

-¡Ayuda!

El muy menzo no vio por donde caminaba y pisó una especie de trampa de cuerda. Y un monito espiritual le robó la comida mientras su conejo no se movía en lo absoluto... Tuvo que sacudirse para romper la rama y por lo menos volver al suelo. Pero después se terminó cayendo en un charco de arenas movedizas.

-Genial, ahora ¿cómo salgo de aquí?

El conejo nomas se le quedó viendo. No parecía estar con ganas de cooperar. Y cuando Bon le pidió ayuda este salió corriendo.

-¿Por qué a mí? Si me hubiera disculpado con Bonnie no estaría aquí atorado.

Pero en ese momento, el animal volvió y traía una rama bastante grande en su boca. Bon la tomó y ambos hicieron fuerza para que por fin saliera.

-Gracias amiguito. -Bon lo acarició y el conejo comenzó a guiarlo hacia el monte. En el terreno alto quizá podría orientarse.

Con Bonnie: