22. DECISIONES

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-A ver, no te lo voy a decir más veces, quiero que me dejes entrar a ver las cámaras de seguridad, y si por las buenas no lo haces, por las malas a lo mejor lo haces sin una mano. – Yuri, de muy malas maneras amenaza al encargado de la gasolinera.

-No puedo, por ley de protección de datos...

-Y ¿que te parece esta ley? – le dice Diego, cogiéndolo del brazo y obligándole a darse la vuelta y a ponerle contra la pared, con la pistola en el cuello.

-¡Vale! – grita desesperado el empleado, intentando girarse al ordenador.

No tarda ni dos minutos en encontrar las imágenes y deja que Diego y Yuri se coloquen delante a verlas, con Dima sujetándole por el cuello y Joao en la puerta vigilando.

En las imágenes se ve claro. Un Sebastian, claramente borracho, aparentemente feliz, va caminando por la autopista hacia la gasolinera, cuando una furgoneta se para y dos encapuchados le meten en la parte de atrás a punta de pistola. Como se temia, su primo Sebastian esta secuestrado por alguien.

Diego lanza todo lo que hay encima de la mesa al suelo y comienza a golpear todo lo que pilla hasta que Yuri le coge por los brazos.

-Se ve la matrícula de la furgoneta Diego, si son un poco tontos los tenemos.

-Yuri, como lo hayan matado...

-No lo han hecho, si se lo han llevado algo quieren de el, y si no lo consiguen vendrían a pedírtelo a ti.

Se gira y mira al encargado.

-Tu, mándame eso a un correo y lo borras.

El encargado asiente y se dispone a hacerlo con Yuri de fondo llamando a alguien y dando el número de matrícula.

Cuando todo queda borrado, salen directos de la gasolinera al coche.

Diego se frota la cara, no sabe que hacer.

-Deberías avisar a Víctor. – le dice Yuri.

Marca el número de su primo y pone el altavoz para ir escribiendo a la vez a distintos contactos si conocen la furgoneta y la matricula.

-Dime Magno, ¿sabemos algo de Sebas?

-Victor, vete a la casa de la sierra ya, coge lo más necesario y te vas allí. Llama a tus hermanos y que hagan lo mismo, estoy mandando un escolta ruso a cada uno de vosotros, en menos de media hora os están recogiendo.

-Pero ¿que pasa?

-Os lo explico luego, de verdad, confiad en mi, os quiero a todos allí antes de esta noche. Y obviamente que nadie diga nada de donde vais.

-Vale. Voy llamando a los chicos.

-Gracias Victor.

-¿A casa? – pregunta Yuri

-Si, tenemos que coger varias cosas antes de ir allí a atrincherarnos. Prefiero que estemos todos allí. ¿Quieres llamar a tu hermana?

-No no, deja a mi hermana que ella vive feliz en Mallorca y poco sabe de todo esto... Y...

-Dilo anda, que lo estas deseando.

-¿Con ella que vas a hacer?

Pierde la mirada en la carretera y se debate entre las ganas que tiene de tenerla cerca todo el rato, y querer protegerla a toda costa de esta vida que lleva. Vida a la que le queda poco tiempo de ser así, pero no quiere que ande metida por estos mundos.

-Voy a preguntarla. Pero creo que debería venirse en unos días, ha sido una situación difícil y...

-¿Y si la siguen?

SIN LIMITESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora