Snake es el club de prostitución y de streaptease más cutre de todo Madrid. A la vez el más grande y el más conocido. Todo el mundo conoce ese sitio y quien lo regenta. Todo el mundo sabe que a pesar de no ser el más lujoso es prácticamente una fortaleza porque ahí es donde Risto y Malbicho guardan todo lo importante.
Cuando Diego y su pequeña familia llegan al poco iluminado aparcamiento del club ve claramente el coche de Katerina y el más conocido de Risto en la puerta. Si está ella, también tendrá algo que ver. Si está Risto ahí está todo claro. Sólo tienen que entrar, cargarse a todo el que pueda y buscarla antes de que la saquen ellos por otro lado. Aún sabiendo que están más que preparados para hacerlo, tiene un miedo que siente desde la garganta hasta los dedos de los pies.
-Yuri, si pasase algo tienes claro lo que tienes que hacer, ¿verdad? – pregunta Diego antes de bajarse de la furgoneta.
-Fundirme todo el dinero en cualquier burdel de Tailandia. – contesta sonriendo y bajándose de la furgoneta con la semiautomática colgada a modo de bolso.
-Ya sabéis que esto tiene que ser rápido, si viene la policía estamos todos jodidos. La prioridad es el rescate, si os los lleváis por medio mejor, pero la prioridad es salvarlos. – dice antes de avanzar con paso decidido hacia el burdel.
-Diego, ¿y si entramos como si fuéramos los GEO nosotros? – pregunta Yuri con algo parecido a un ariete en la mano.
- Se me ocurre algo infinitamente mejor.
El estruendo de la entrada retumba en todo el club. Las paredes se hacen eco de lo que puede haber pasado arriba.
Katerina y Risto se miran y miran a sus dos presas.
-Cogedlos y subirlos a la caja. Son la moneda de cambio que tenemos. - dice Risto.
- ¡Ni de coña! – grita una Máxime a la que zarandean y reducen en poco tiempo.
-Tranquila bonita, ¡no te alteres! – grita la Rusa empujándola contra la puerta.
Máxime pone las manos en alto y camina por el pasillo con Sebastián detrás en la misma posición.
El Snake es un club antiguo que tenía su encanto. La planta baja tiene el techo decorado con cristales, cristales que son espejos por los que se ve solo desde arriba, desde abajo se ve como un manto de luces. La planta de arriba estaba destinada a eventos privados, el despacho y la caja fuerte.
La planta baja también tenía por entrada una cristalera gigante, que acaban de atravesar con un Hummer.
Los tiros retumban en todos los cristales del techo que empiezan a caer y dejan al descubierto la escalera por la que se sube, aunque nadie le preste atención.
Los guardaespaldas de Risto, junto con Malbicho, se esconden tras las barras y las chicas que estaban bailando corren a esconderse antes de que empiece el verdadero desastre.
-¡Cubridme! – grita Diego corriendo con Yuri hacia la escalera de bajada que está al lado contrario de las escaleras de subida.
Diego corre casi sin aliento por la escalinata y abre todas las puertas a su paso, la última, la del fondo está abierta y ve en el suelo la sudadera de Máxime manchada de sangre, junto con una de las zapatillas de Sebastián.
-¡Subamos! ¡A la caja! – grita Yuri subiendo de nuevo por la escalera.
Entrando a la sala agachado y reptando hasta donde pueden cubrirle sus compañeros.
Máxime y Sebastián están arriba, custodiados por solo dos guardaespaldas. La rusa y Risto han desaparecido por la escalera de subida.
Max, sorprende a los dos guardias sacando una pistola que le ha robado hábilmente a uno de ellos en el forcejeo y dispara a bocajarro contra el pecho del más grande, agarrando al pequeño y usándolo de escudo hasta la puerta.
-Sebastian, cambio de planes. Tenemos que llegar ahí abajo.- dice señalando el Hummer que ve desde arriba, con el corazón en un puño al ver a Diego apoyado en el coche disparando.- y tu, ni mu o te vuelo la tapa de los sesos como a tu colegui.
Diego ve la escalera de subida al fondo y mira a Yuri.
-¡Quitamos a dos o tres más y subimos! – le grita Yuri leyendole la mente.
Tras esos disparos que le quitan del medio a los tres que necesitan, se aventuran a salir hacia la escalera de subida.
Todos se mueven haciendo que les sea más fácil.
-No he visto ni a Risto ni a Malbicho. – dice Diego al llegar a una columna
-Esos tienen la cabeza escondida en una agujero Diego. ¿Subimos?
Son dos tramos de escaleras. Uno que sube hasta la mitad en el que se encuentra una pequeña barra y desde el que se ve la segunda subida, la llegada al segundo piso. Los tiros que vienen de arriba cesan, pero no deja de escuchar tiros en la misma escalera.
-Disparan desde arriba Yuri.
-¿¿¿Los GEO??? – pregunta preocupado y mirando hacia la salida de la escalera.
-No creo...
Un cuerpo cae rodando por la escalera y se ve como unas sombras bajan por ella. Diego no duda en disparar al primer cuerpo que ve, el guardaespaldas más bajito de Risto. Lo conoce a la perfección. Su cuerpo cae rodando por la escalera, dejando al descubierto el de Máxime y el de Sebastián, escondido tras ella.
Un nuevo estruendo y un montón de gritos con luces azules les interrumpen semejante sorpresa.
-Esos sí son los GEO. – dice subiendo hacia Máxime y Sebastián llevando a Diego con ellos.
Diego se queda mirándola sin saber que decir.
-Tienes que salir de aquí. A mí pueden cogerme, a ti no. – se atreve a decirle ella, quieta.
-¿Todo ha sido mentira? – pregunta a un metro de distancia.
-Nada ha sido trabajo desde que nos tomamos tu triste helado de nata.
Los dos se miran buscando respuestas que nadie dice.
Sebastián se adelanta y camina hacia la barra.
-Hablad luego, por favor.
Todo ocurre muy rápido. Máxime ve el reflejo de un vestido azul de satén por uno de los espejos viniendo hacia ellos, no duda ni un solo segundo y gira a Diego interponiéndose entre ella y él.
El disparo parece sonar por encima de todo lo demás.
Máxime hubiera caído a plomo al suelo si no fuera porque Diego la coge entre sus brazos y se tira con ella al suelo, viendo cómo pierde sangre. Como empieza a perder la consciencia.
Sus ojos no pierden contacto con los de Diego hasta que siente frío y tanto cansancio como paz.

ESTÁS LEYENDO
SIN LIMITES
מתח / מותחןMaxime es una joven policia que acaba de ser promocionada al equipo de investigacion de su novio, con la mala suerte de que, el primer dia, la usan de cebo para conseguir informacion para un caso muy importante. ¿Mala suerte? Depende de por donde se...