Capitulo 10: El Deseo De La Escudera

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El aire era suave con la brisa del medio día, el calor del sol llegaba a su cuerpo y la hizo sentir viva.

Aún que el marido de su corazón demostró aún más que lo estaba, este se hizo sentir en su pecho a medida que el objeto púrpura y dorado era contemplado por ella.

Los ojos de la arquera estaban fijos en el regalo que había recibido, su mente estaba frenética mientras buscaba una forma de limpiarlo, guardarlo y conservar de forma correcta.

Este obsequio que quizás era ahora su posesión más valiosa, no sólo en oro sino sentimentalmente.

Neia sonreia de lado a lado mientras acerco el pañuelo a su nariz y olfateo de forma tímida este.

Sus sentidos se volvieron locos a medida que sonrió más y su corazón se aceleró.

Pero este bello sentimiento que surgía en su mente, duró poco al momento de escucharla y ver detrás.

-Remedios: Tu.....Idiota...

Ella de forma casi instantánea y veloz escondió el regalo que le había dado su majestad en sus ropas.

A pesar de que Neia quería proteger el pañuelo en un cofre o ítem mágico, no pudo ante la tormenta que estaba detrás de ella.

Que volteo y apenas lo hizo, se escucharon los truenos.

-Remedios: ¿Se puede saber....? ¿Que hacías rompiendo la orden que te di escudera Baraja?

La ira de la capitana apenas era contenida bajo su vos suave que se originó de las sugerencias de su mano derecha y se podían ver las venas de los ojos de Remedios a medida que está apretaba los dientes.

-Neia: Esta se encontraba sirviendo a su majestad el Rey Hechicero Ainz Ooal Gown tal y como debe...

Respondio antes de ser sujetada del cuello por las manos de la capitana y esta le grito a la cara.

-Remedios: ¡¿ME TOMAS POR IDIOTA?!

Neia cerró sus ojos aturdida por el grito a la ves que la saliva de Remedios llegaba a su cara, al mismo tiempo el segundo del segundo.

Un subordinado de Gustav que estaba detrás de la Remedios la sujeto del hombro y hablo.

- Ca....Capitana....Por favor baje la vos.

La bestia encolerizada miro a Neia que estaba sin su visor y noto el miedo en esta que parecía entender.

Ella liberó a Neia, la cual tocó nuevamente el suelo a la ves que la paladina le habló en tono severo.

-Remedios: Tienes suerte de que esto no haya ido a más, no sabes cuánto me gustaría castigarte.

Ella dudo si responder de forma hostil pero se calmó, en un segundo la mente de Neia pasó de terror a calma.

Se sorprendió de esto pero de alguna forma, si miedo a la capitana empezó a menguar y subpostura recta lo demostró.

De forma inconsciente se puso firme delante de ella a la ves que respondió con un toque de respeto.

-Neia: Su sirviente simplemente cumplía su deber de aten...

-Remedios: ¡Silencio! Solo escucha y obedece.

Ella la cortó de la nada a medida que dejó escapar su ira nuevamente y Neia apenas mostró sorpresa.

Se mantuvo firme y no dio un paso atrás, lo que dejó aturdida a Remedios un segundo antes de continuar en un tono más bajo.

-Remedios: Su alteza Caspond regresará en 1 hora junto al Rey Hechicero para un banquete y tienes totalmente prohibido estar cerca...¿Entendido?

Las miradas de los sirvientes, escuderos y paladines estaban llegando a ellas y Neia lo noto.

Overlord: La Arquera De Ojos AsesinosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora