Wishes 5

572 75 43
                                    

Shay era muy divertida, me parecía bastante hermosa y tenía muchas intenciones conmigo pero yo no quería avanzar demasiado considerando que me iba en un par de semanas, de todas formas Lali la invitó a su improvisado panorama así que llegamos a Nueva York en grupo. Eugenia estuvo todo la caminata con mi hermana ignorándome por completo, como si la noche pasada no existió, cuando nos sentamos a comer la miré un par de veces pero ella no lo hizo una sola vez.

—¡MAMÁ! —escuché ese grito y me giré, Euge se puso de pie para abrazarla, se fundieron en un abrazo maravilloso, mientras tanto el padre de Rufina que también era muy parecido a ella nos saludaba a todos con mucha buena onda— Hola tia —Rufina también nos saludó uno por uno— ¿Que tal? —me miró con una sonrisa

—Es mi hermana —le dijo Gigi

—Se parecen —agregó con una sonrisa— mi nombre es Rufina, soy hija de Euge —la apuntó— seguro ya la notaste ¿Cómo te llamas? —me preguntó

—Bella —dije con una sonrisa— Claro que me di cuenta, tu mamá me habló cosas muy lindas sobre ti

—¿En serio? —dijo sorprendida y corrió hacía ella— Mami que dijiste sobre mí? si me extrañas? Te extraño mucho, no quieres pasar más días, tía gracias por este plan improvisado me puse muy feliz cuando mi papá me dijo que estaban en la ciudad

—De nada mi amor, también te extrañé mucho — dijo Lali. Rufina se acercó a Peter e hicieron un prolongado saludo de mejores amigos.

—Es muy linda —me miró Gigi y asentí, regresó a los brazos de Eugenia.

Seguro iba a estar así todo el viaje, la llenaba de besos y nos contaba todas las cosas que hizo con su padre, él también se sumaba a la conversación hablando embobado de su hija, me cayó muy bien, se notaba que tenían una relación muy linda con Euge. Después de la comida caminamos por diferentes lugares de la ciudad, estaba muy diferente a la última vez que estuve acá eso sí me sorprendió bastante, tomé un par de fotos del grupo hasta que llegamos al árbol que quería visitar Lali, obviamente les saqué varias fotos románticas con Peter, mi pareja favorita.

—¿Sabes patinar Bella? —me preguntó Rufina mientras se cambiaba los zapatos.

—No sé patinar muy bien pero sé esquiar —dije con una sonrisa— ¿Sabes? —asintió— bueno, supongo que me va a servir, no? —me chocó los cinco para darme ánimo— ¿Me quieres dar un consejo? —pregunté

—Simplemente tienes que patinar con mucha seguridad y mover los pies de esta manera —me mostró y todos se rieron— Ok, te veo en la pista —entró corriendo

—Yo me voy a quedar tomando fotos desde acá —me dijo Shay— me duele la rodilla y estoy completamente segura que me caigo, que les vaya bien. Seré la porrista desde acá —celebró mientras todos entraban con seguridad a la pista. Mi hermana se reía mirándome.

—Esta es una mala idea —dije riendo y entré luchando con mi equilibrio

—Epa epa epa —me agarró Eugenia por suerte o salia volando, Rufina estaba patinando con su papá a toda velocidad— ¿Necesitas ayuda? —preguntó y le tomé la mano para no caerme, entonces me llevó al borde y se apoyó conmigo en el fierro— es el comienzo el que cuesta después vas a estar como Rufina —Lali y Peter estaban en un costado besándose— tiene que ser una broma, nos trajo para esto?

—¡vivan los novios! —gritó Gigi— que hijos de puta —dijo mi hermana y se fue lejos

—Ella debería estar ayudandome, por favor anda a patinar con tu hija, yo voy a conseguir mi equilibrio —dije con una sonrisa y Eugenia me miró sin ninguna fe, entonces se movió donde su hija, intenté patinar para joder a Lali y me costó bastante pero lo hice— ¿Vinieron a besarse?
—No te pongas envidiosa, ya te va a tocar —dijo Peter con una sonrisa y el brillo de lali en los labios

Cortos BeugeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora