Seguía en mi fase de "semanas difíciles" pero me esforzaba mucho por recuperar mi rutina en la empresa, no quería que mi vida personal siguiera afectando todo. Por otro lado todos mis análisis seguían marchando a la perfección para comenzar con el tratamiento pero yo seguía llena de dudas.
—Stefanía —dije con una sonrisa contestando en alta voz, estaba respondiendo correos importantes— ¿Como estas?
—Maria Eugenia —me imitó— todo bien y tu?
—Surfeando la ola —dije riendo— A que se debe esta sorpresa?
—Necesito que me salves, estoy en la ciudad y me alquilé un hotel que se está cayendo a pedazos, me van a cambiar de habitación pero la verdad es que quiero buscar algo mejor, vengo por trabajo y quiero estar cómoda, puedes darme una mano con alguno de tus contactos, sabes que que conozco a nadie acá —me dijo.
—Vente a casa, no hay problema —dije mientras miraba unas fotos de mi computador.
—¿En serio? Pero no te quiero hacer lío con Bella —agregó.
—Bella no es un problema —Stefania siempre en una burbuja— En realidad, estoy separada así que no pasa nada, no te preocupes, de todas formas no vengas a la oficina juntémonos en mi edificio porque estos hijos de puta me están siguiendo a todos lados, voy a llamar al conserje para que te de una llave, yo estoy por allá tipo siete de la tarde, en la cocina hay de todos por si tienes hambre.
—Mi salvadora de la vida, gracias Chinita. Nos vemos a la tarde, un abrazo.
En cuanto colgué pensé que tan buena idea era esto, pero en realidad no tenia que darle explicaciones a nadie sobre lo que estaba haciendo pero obvio que me preocupaba Bella, terminé de trabajar y me fui a casa, cuando abrí la puerta había un olor increíble comida italiana, colgué mis cosas y entré a la cocina.
—Tuve un flashback —dije riendo y le di un abrazo— Cómo estás?
—Iba a poner la mesa para tener todo listo cuando llegues pero me ganaste como siempre, ahora que llegaste voy a poner las pastas, están hechas con mis propias manos —advirtió con una sonrisa— Todo bien, un poco cansada pero bien.
—Voy a poner la mesa —dije con una sonrisa.
Me ocupe de eso mientras ella terminaba de cocinar, después de cambié para estar más cómoda mientras miraba algunos correos que me quedaron pendientes para mañana.
—Salud —me dijo y chocamos las copas, la comida tenía un olor increíble.
—¿Que tal todo en Los Ángeles? ¡Como creció el personaje! Medio mundo te ama en las redes, que buena onda eso de que la pasaron a la otra serie porque no la valoran tanto en Greys.
—Si, hicieron una historia que esta bien interesante. Estoy feliz y emocionada por eso, porque a la gente le gusta un montón —me dijo con una sonrisa— Estoy bien, tranquila... siento que encontré como esa estabilidad laboral que quería y ahora me están llamando de lugares para casting, eso tambien esta increíble, tengo como la necesidad de mejorar todo el tiempo, pero la verdad es que no hay nada nuevo, además de todo eso ¿Como es eso que te separaste? Yo vivo en una nube, nunca me doy cuenta de estas cosas, pensé que ustedes no terminaban mas, te veías tan enamorada, no sé...
—Estoy enamorada —respondí— Ella me dejo —sincera siempre— No tuvimos problemas la verdad, fue el tema de la maternidad que a Bella le dio pánico y salió corriendo, ha sido muy triste porque la amo muchísimo y pienso todos los días ¿Que pasa si renuncio yo a eso? —ella soltó una sonrisa.
—Que lastima —me dijo triste— Lo siento mucho aunque no lo creas —obviamente me reí— Bueno yo siempre te dije que ella era como una niña para ti, tu eres una persona muy madura con todas las cosas muy claras y bueno después está ella que piensa que es una adolescente aun.