Crush Dimensional || BNHA

Capítulo 16 : Depresión

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n o r m a l

     Bakugō Katsuki es conocido por tener un temperamento explosivo.

La Clase A conoce mejor al rubio de las explosiones y aprendió cómo llevarse bien con él, a pesar de no pertenecer al mismo grupo social. Es por eso que la mayor parte de los miembros de la clase están asustados y la minoría sumamente preocupados con el nuevo comportamiento del rubio.

Bakugō está deprimido.

La situación sería normal bajo explicaciones y conceptos que encajen con el chico, pero no hay una razón concreta para que este deprimido en primer lugar.

Kirishima asegura que no están peleados y los demás miembros del Bakusquad también. La Clase B incluso mostró preocupación porque no ha peleado con Monoma y faltó al trote matutino que comparte con Shishida. Incluso Camy, ex-estudiante de Shiketsu, ahora graduada, llamó a Todoroki y le dijo que Bakugō le pidió que deje de mandarle mensajes. Lo cual es sumamente raro ya que, en primer lugar, nunca le responde los buenos días.

Aumentó la preocupación cuando dieron a Bakugō de alta y no mostró emoción por retomar los entrenamientos heróicos.

En realidad, no asistió a los entrenamientos heróicos.

A este punto Aizawa Shōta, maestro a cargo de la Clase A, también comienza a preocuparse por su alumno.

— Así que nadie sabe nada.

— No. Lo sentimos sensei.

     Iida y Yaoyorozu, como representantes de la clase, mostraron preocupación por su compañero y vergüenza por no entender qué le sucede.

— Hablamos con Kirishima-kun y los demás y nada. —dijo Yaoyorozu. — No hay una razón válida para su comportamiento, no ha peleado con nadie tampoco.

— ¿Que hay de Midoriya? —Aizawa cambió de perspectiva.

     En su lógica si Kirishima no sabe la respuesta, debe tenerla Midoriya.

— También pregunté y Midoriya-kun no sabe nada. —Iida suspiró. — Siendo sincero sensei, Bakugō a estado actuando extraño desde que llegó a los dormitorios.

— ¿Extraño? —eso llamó la atención del adulto.

     Extraño es igual a problemas.

— Iida-kun. —Yaoyorozu lo regaño por lo bajo. — No extraño, Aizawa-sensei. En mejores términos, diría que más tranquilo. Bakugō-kun se ha vuelto más sociable con nosotros, en ocasiones hemos compartido opiniones de diversos temas que no imaginé fueran de su interés.

— Eso es suficiente extraño para mí.

     Con la charla finalizada, Aizawa despidió a los estudiantes y se aventuró por los pasillos del dormitorio en busca de su estudiante problemático por excelencia.

Honestamente, Aizawa no notó nada extraño estos últimos días. Bakugō sigue siendo el mismo niño problematico y los cambios que dicen notar los otros estudiantes pueden ser explicados.