DESTINO INCIERTO 🐰KOOKMIN 🐥 OMEGAVERSE.

Iras con nosotros

Dicen los ancestros que la mejor bendición que pueden llegar a tener una pareja es un hijo concebido con amor, desde años o mejor dicho décadas atrás las parejas entre Alfas y Omegas fueron las más bendecidas, era por ello que ver a Alfas con Betas era reprochado y mal visto. Era una pareja que solo estarían juntos por el simple placer sexual y nada más, eso era lo que decían, pero... ¿Qué porcentaje de realidad era aquello?, ¿Cuánta verdad abarcaba esas palabras?

El cielo se encontraba despejado la luna llena y las estrellas era la vista más hermosa que todos en la cuidad podían apreciar.

Los autos recorrían las calles, los transeúntes caminaban por las aceras, las tiendas emanaban sus luces coloridas. Todo se veía pacifico. Parejas enamoradas, gente solitaria, había de todo un poco.

Aquel fin semana donde Jimin y Jungkook se volvieron amigos había transcurrido de buena manera. Conversaron un poco llegándose a conocer mientras esperaban que sus amigos llegaran con la comida que salieron a comprar. Preguntas iban y preguntas venían, casi todas fueron respondidas. Jimin omitió algunas cosas no porque desconfiara sino más bien por el hecho de que no quería aun decírselo. Quizás en otro momento.

Números fueron intercambiados aquel día y con ello también palabras de __ responderé cuando este libre __ eso sacó una leve sonrisa a Jungkook por lo mencionado. Sin duda alguna Jungkook no era Jungkook cuando estaba junto a Jimin.

Bien dicen que una persona solo cambia cuando está cerca de quien ama y ese era el caso de Jungkook, su comportamiento dócil junto a Jimin era sorprendente.

Pero no todo siempre es color de rosa, había momentos en los que los recuerdos llegaban con sutileza y melancolía, recordando que un día se sintió así de bien en compañía de otra persona, recuerdos que a pesar de los años aun duelen y las grietas que quedaron aún pueden ser visibles.

Todos en cierto punto llevan grietas consigo que no suelen querer mostrar a los demás y eso era lo que pasaba tanto con Alfas, Omegas y Betas, pero a pesar de sus grietas mostrar una sonrisa cálida si era posible.

Dicen que el tiempo cura todo, pero a decir verdad no sé si aquello sea cierto, quizás no es el tiempo quien lo cura sino nosotros mismo a punta de voluntad.

La empresa que Jungkook maneja marchaba bien, sus colabores y él como jefe lo hacían bien, sus ingresos eran buenos por no decir excelentes. Su fama subía y el cómo Alfa dominante soltero que es comenzó a ser más reconocido de lo que ya era.

Sus padres estaban orgullos, pero así mismo querían emparejarlo cosa que Jungkook negaba rotundamente. No cuando ya tenía a alguien en su corazón. Pero ya saben los padres nunca se rinden.

Por el lado de Jimin se mantenía trabajando en la cafetería entre semana y el bar el fin de semana aquello no cambio para nada. Su rutina era la misma con la diferencia de que en momentos libres respondía los mensajes que Jungkook le envía. Sin duda alguna su química era buena y Jimin se sentía inexplicablemente seguro.

Taem quien quería olvidar y enterrar su pasado le era difícil ya que una vez más volvía a encontrarse con su antiguo amor. Odiarlo no podía por más que quisiera, pero perdonarlo también se le era difícil. Su vida estaba patas arriba en cuestión de segundos, pero no buscaba ningún culpable.

Minho sufría en silencio y se atormentaba por haberle fallado, no sabía que podía hacer para conseguir su perdón y ya hasta comenzó a dudar si aquello era posible, pero no quería darse por vencido. Su destino era Taem y de eso estaba seguro y no había nadie en la tierra o el cielo que pudiera cambiar aquello. Su destino también era incierto y nadie sabía que era lo que iba a suceder entre los dos Alfas que un día estuvieron juntos.