𝘊𝘢𝘳𝘭𝘪𝘴𝘭𝘦 𝘊𝘶𝘭𝘭𝘦𝘯 | "𝘚𝘰𝘭𝘰 𝘵𝘦𝘯𝘨𝘰 𝘶𝘯𝘢 𝘤𝘰𝘴𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘥𝘦𝘤𝘪𝘳𝘵𝘦 𝘴𝘰𝘣𝘳𝘦 𝘦𝘴𝘵𝘢 𝘯𝘰𝘤𝘩𝘦, 𝘢𝘮𝘰 𝘢 𝘵𝘶 𝘱𝘢𝘱𝘢́"
Johaiska es la mejor amiga de Edward, y ambos residen en Forks. Pero todo cambia cuando Johaiska con...
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EN LA MAÑANA en que Edward y Johaiska abandonaron la pista de hielo, había algo extraño en el aire. Esa sensación de peligro que le calaba en los huesos y hacía que se le pusiera la piel de gallina. Sintió sus manos duras al quitarlas del volante. Edward había salido de la pista más temprano pues alegaba que tenía algo importante que hacer antes de ir a la escuela, por lo que la pelirroja terminó sola la práctica. Se tomó un momento para aclarar sus ideas cuando vió la camioneta naranja de Bella pasar por el retrovisor. Decidió que iría a saludarle, se notaba que a Edward le agradaba la chica, por lo que intentaría agradarle a ella, no quería ser la típica mejor amiga celosa que arruinaba las relaciones.
Salió del auto para encontrarse con Bella, quien miraba las llantas de su auto que estaban recubiertas por finas cadenas entrecruzadas.
—Bella —le llamó captando su atención, que un segundo antes estaba en Edward al otro lado del estacionamiento. Ella volteó y le sonrió tímidamente—. Hola Swan.
—Hola —le saludó de vuelta—. Justo iba camino a biología.
—¿Te creeré? —le saludó con un beso en la mejilla y se recargó en la camioneta naranja—. Buena idea en ponerle cadenas a las llantas.
—Fue..., fue idea de mi padre, en realidad —se acomodó el cabello.
Antes de que tuviera tiempo a responder un extraño sonido llamó la atención de ambas, era alguna especie de chirrido. Era un chirrido fuerte que se convertía rápidamente en un estruendo.
Vieron varias cosas a la vez. Nada se movía a cámara lenta, como sucede en las películas, sino que el flujo de adrenalina hizo que sus mentes obraran con mayor rapidez, y pudiera asimilar al mismo tiempo varias escenas con todo lujo de detalles.
Edward Cullen se encontraba a cuatro autos de distancia, y les miraba con rostro de espanto. Su semblante destacaba entre un mar de caras, todas con la misma expresión horrorizada.
Pero en aquel momento tenía más importancia una furgoneta azul oscuro que patinaba con las llantas bloqueadas chirriando contra los frenos, y que dio un brutal trompo sobre el hielo del aparcamiento. Iba a chocar contra la parte posterior del monovolumen, donde Johaiska y Bella estaban en medio de los dos vehículos.
