𝘊𝘢𝘳𝘭𝘪𝘴𝘭𝘦 𝘊𝘶𝘭𝘭𝘦𝘯 | "𝘚𝘰𝘭𝘰 𝘵𝘦𝘯𝘨𝘰 𝘶𝘯𝘢 𝘤𝘰𝘴𝘢 𝘲𝘶𝘦 𝘥𝘦𝘤𝘪𝘳𝘵𝘦 𝘴𝘰𝘣𝘳𝘦 𝘦𝘴𝘵𝘢 𝘯𝘰𝘤𝘩𝘦, 𝘢𝘮𝘰 𝘢 𝘵𝘶 𝘱𝘢𝘱𝘢́"
Johaiska es la mejor amiga de Edward, y ambos residen en Forks. Pero todo cambia cuando Johaiska con...
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—Cariño... —Carlisle se sentó a un lado de Johaiska, quien estaba sentada en el borde de la cama mientras se limpiaba las lágrimas, evitando mirarlo.
—Saldré para que ustedes dos puedan hablar —ella asintió y Jasson abandonó la habitación.
—Habla conmigo, por favor —le tomó de la mano y le hizo un pequeño cariño—. ¿Por qué no me contaste?
—Por qué... —suspiró con la voz quebrada—. Sé que quieres que tome el tratamiento, o que me someta a alguna cirugía que podría arruinar mi carrera.
—Pero lo importante es que tú estés bien.
—Es que tú no me entiendes Carlisle —se paró de la cama y camino en círculos hasta detenerse frente a él—. Lo que yo siento por el patinaje..., es como lo que tú sientes por la medicina. Ese escalofrío que te recorre el cuerpo cuando sabes que lo estás haciendo perfecto, sientes que puedes respirar perfectamente, sin sentir ningún peso en tus hombros, ninguna herida, ningún problema. Nada, solo tú, y lo que te rodea.
»Sin el patinaje, yo moriría. Si me someto a una cirugía que estancará mi carrera, no se que mas podría hacer para sentirme viva. Si tomo el tratamiento, lo quimio me dejará en el suelo, trapeará el piso conmigo, ni siquiera tendré ánimos de comer, mucho menos de patinar. No hay otra opción —la voz se le quebró—. No tengo otra opción mas que tragarme el dolor si quiero llegar a ser reconocida, si quiero seguir disfrutando de lo que tanto amo. Tu no lo entiendes Carlisle, llevas siglos haciendo lo que amas. ¡Yo apenas tengo diecisiete! —se echó a llorar—. No quiero morir, no quiero morir y nunca mas poder sentir el frío del hielo. Pero de que me sirve estar viva si me siento muerta...
—Pero no morirás... —se acercó hacia ella y le limpió las lágrimas—. Aquí estamos nosotros, somos tu familia. Te vamos a apoyar.
Los gritos se escuchaban en la planta baja, Johaiska frunció el ceño y trató de caminar pero Carlisle la frenó. La tomó entre sus brazos y pareció haberse teletransportado hacia donde se escuchaba la conmoción. Edward y Jasson parecían estar discutiendo, hablaban tan rápido que no se entendía lo que se gritaban el uno al otro.
