Little Cutie | Carlisle Cullen

04.═══ meses

          LA LLUVIA SE escuchaba fuerte, las pisadas en el lodo mojado ocasionaban chapoteos, las hojas y ramas crujían a su paso. Se quitó los cabellos de la cara mientras aluzaba con la linterna a su alrededor. Los perros y gritos llamando por el nombre de Bella se escuchaban a la redonda.

—¡Bella! —gritó con todas sus fuerzas. Se agarró la garganta, que ya le dolía de tanto gritar.

Se sostuvo de un árbol cuando estuvo a punto de caerse, los pies la estaban matando, y no tenía a nadie cerca a quien pedirle ayuda. Miró a todos lados desesperada, Bella estaba perdida en el bosque, a mitad de la noche, bajo la fría lluvia. Comenzó a sollozar y continuó corriendo, aunque sintiera sus pies como dos grandes rocas, como si su cerebro le estuviera diciendo que parara de correr, que se quedase quieta, petrificada, esperando a que alguien la rescatara. Ella sabía que nadie iba a llegar, los Cullen se habían ido del pueblo, Carlisle se había ido, Edward, Alice, Esme, Rosalie, Emmett, Jasper, Arthur. Todos se habían ido y la habían dejado a su suerte.

—¡Bella! —gritó de nuevo con la voz rota. A lo lejos vió una mancha amarilla, acostada en el piso, un amarillo chillón.

Corrió hacia ella, cayéndose en el camino, el corazón parecía querer explotarle, sentía una presión aguda en el pecho, casi como si no le dejase respirar, piquetes en los pies la hacían quejarse del dolor. Johaiska sollozaba fuertemente mientras se acercaba a Bella, quien estaba acostada en el piso, parecía estar inconsciente, pero viva. Llegó a su lado y se apresuró a tomarla entre sus brazos, ahí en el piso y cubriéndose de lodo, sintiendo la lluvia empapar aún más su cara si es que eso era posible, el cabello enmarañado le tapaba la vista. Bella era muy pesada como para llevarla ella sola, con ella inconsistente y Johaiska estando cada vez más débil gracias al cáncer.

—¡Charlie! —llamó varias veces por su nombre, hasta que los murmullos comenzaron a acercarse.

—¡Bella! —Charlie corrió hacia ella y la tomó de los brazos de Johaiska, quien se desvaneció hacia atrás. Su vista parecía querer nublarse, se talló los ojos, y se sorprendió cuando unos brazos la levantaron. Eran unos brazos fuertes y musculosos, buscó por todos lados y vió a Jacob.

—¿Estás bien? —le preguntó. Johaiska asintió y se acurrucó en su pecho, las lágrimas comenzaban a querer salir de nuevo por sus cuencas. Así que prefirió quedarse dormida.

Johaiska se miró en el espejo a un lado de la cama de Bella, quien estaba dormida profundamente, se abrazó las piernas y se acarició los pies. Pequeñas gotas de agua comenzaron a caer en ellos, en sus pies huesudos y con marcas. Carlisle se había ido, y quizá jamás iba a volver, la había dejado sola y desamparada, sin familia, sin amigos, sin nadie a quien recurrir. No culpaba a Jasson por haberse ido con el clan de vampiros, entendía que era difícil para él estar cerca de la gente y las multitudes.

Se paró de la cama y se sentó a un lado de las ventanas de la habitación de Bella, sacó su teléfono y marcó el número de teléfono de Edward. Tardo unos instantes en tomar la llamada.

—¿Hola? —se escuchó al otro lado de la línea. Johaiska se quedó en silencio y colgó.

Llamó en su lugar al número de su hermano, sabía que sería mucho más fácil hablar con él que con Edward, en especial después de que se fuera cuando estaban peleados.

—¿Joha?

—Hola... —suspiró. Los murmullos se escuchaban en el fondo—. ¿Dónde están?

—Mmm —se escuchaban más murmullos de fondo—. Te llamo luego, Joha —Jasson colgó la llamada y la pelirroja se quedó con las palabras en la boca. Dejó el teléfono a un lado con mirada triste y agachó la cabeza.

Octubre

    Noviembre

    Diciembre

    Enero

Carlisle ya no se encontraba en ningún lado, se rumoraba que los Cullen se habían ido gracias a que le habían ofrecido al patriarca un lugar importante en un gran hospital de Los Ángeles. Bella estaba muy inestable, depresiva y abatida, Johaiska iba a visitarla de vez en cuando pero en realidad no veía mejora.

La pelirroja tuvo que volver a su hogar, a ese lugar desagradable que odiaba, topándose de vez en cuando con todos sus hermanos al final de la calle. Ella sabía que ellos no tenían la culpa de nada, pero realmente había sido un milagro que ella y Jasson hubiesen logrado unirse, y todo había dependido de una muerte, no quería probar el mismo tipo de suerte con el resto de ellos.

El cáncer sin duda había empeorado, se retiró, no por voluntad propia, sino porque Carlisle llamó a Dasha para ponerla al tanto de la situación, ahora tenía prohibido patinar. Así que todo lo que había hecho había sido en vano, y el dolor aumentaba con día.

Todos sabían que Bella estaba muy mal, casi al borde de la muerte, Johaiska era con la única persona con la que hablaba, ambas se sentaban alejadas de los demás en la cafetería y se quedaban en silencio mientras comían su comida. A veces dormían juntas, al parecer, eso ayudaba a la castaña a estar más tranquila, pero Johaiska parecía inquieta, como si algo le estuviese picando la costilla, como si estuviese guardando un secreto.

¡Feliz navidad chic@s!, muchas gracias por leer, espero que disfruten con sus familias estas épocas tan bonitas, y mucha fuerza para aquellos que tienen a un familiar lejos de ustedes, los amo felices fiestas 🫶🏻🫶🏻🫶🏻💗