𝐐 𝐔 𝐄 𝐑 𝐔 𝐁 Í 𝐍 // [tysh/joshler]

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El oír el auto de su padre estacionarse frente a la casa, apagó el cigarro, y lo tiró por la ventana. Se puso una camisa blanca, y se sentó sobre el colchón de su cama con un par de libros.

Libros religiosos.

—¿Ty?—Su padre abrió la puerta de su habitación despacio topándose con su hijo.

—¿cómo te fue hoy?—Sonrió el menor.

—Genial, salvé mas vidas, eso es una bendición.—Sonrió algo forzado.—Tu madre viene de camino con Jay, para que bajes a cenar ¿si?

—De acuerdo.

—Bien, te quiero.—Salió y dejó la puerta de la habitación.

Tyler Joseph, era parte de una familia religiosa. Religioso extremo, que hasta cierto punto era algo tóxico. Todo lo malo lo justificaban con eso, y todo se solucionaba hablando con Dios.

Tyler en si no era como su familia. La oveja negra de la familia. Tyler toda su vida, literalmente TODA su vida estuvo rodeado de oraciones, cruces, estatuas de Jesús, la biblia, misa todos los domingos a las ocho de la mañana, y una familia tán religiosa que hasta daba miedo... aveces.

A comparación de su hermano menor, que hacía las cosas porque quería, Tyler hacía las cosas más que nada por costumbre.

Hacía oración en la mañana, en la noche, y antes de cada comida... por costumbre. Leía la Biblia, por costumbre. Iba a misa por costumbre. Y más que nada por obligación.

Y él sabía muy muy muy en el fondo de su corazón sabía que algo estaba mal en él. Que él no encajaba allí. Él sabía que estaba "enfermo", y por más que no quisiera Dios lo sabía.

Que él no se sentía "iluminado por esa luz", él no se veía en eso, no creía. En si, era algo rebelde por dentro, un lado que no se atrevía a sacar.

Tyler sabía que si fuera él mismo estaría en problemas con su familia, problemas que prefería ahorrarse.

Además, su instituto era religioso, así que, en sí, no podía zafarse de eso. Aún así, aveces se escapaba, y su mejor amiga y amigo lo respaldaban.

Devon Williams, y André Díaz.

Los conoció en el instituto, hace unos años, los tres con la misma historia. Sentían que no encajaban.

Empezando por André. André tenía problemas con su familia, su madre era muy agresiva, y aún que ella no lo admitiera, es alcohólica, cuando castiga a a André por lo que fuera, le pegaba mientras decía el padre nuestro. Algo... turbio.

Devon, una vez su padre vio la perforación que la chica tenía en el ombligo, y le obligó a hacer una oración para sacarse "al demonio" que tenía dentro porque claro... "las perforaciones sólo para los que van al tal infierno". Aún así, Devon aveces se "rebelaba" con su familia, pero en el instituto, como una alumna más tenía que ser un ángel. La familia de Devon estaba dispuesta a mandarla a un psicólogo, pero el psicólogo en si les dijo que la chica no tenía absolutamente nada malo. Solo era una adolescente más del montón.

Los tres. Tenían que ser perfectos cuando los tres sabían que no encajaban.

—¡Tyler!—Oyó la voz de su padre que lo sacó de su burbuja.

El castaño se aseguró de que su camisa no oliera a cigarro, porque lo matarían.

Bajó las escaleras despacio, sin ninguna prisa. Su hermano, su madre y su papá ya estaban en la mesa.

Tyler se sentó, y los cuatro tomaron sus manos para proceder la oración de dar gracias por los alimentos.

Nada nuevo.

—Mañana la misa es a las nueve. —Comentó Kelly.

—¿y eso?—Respondió Jay. Su hermano.

—Hay un nuevo sacerdote.

—¿Enserio? ¿Que le pasó al señor Enrique?—Habló Chris.

—No estoy segura. Pero a lo que me informaron, la misa será a las nueve.

—¿Ty a ti como te fue hoy?—Su madre levantó la vista del plato para mirar a su hijo.

—Normal. Como siempre.

—¿leíste la biblia?

—Sí.—Respondió de mala gana.

—Bien, cuando terminan de comer, los dos se lavan los dientes y se duermen, mañana será un gran domingo si así nos lo permite Dios.—Sonrió la mayor.

Así fue. Tyler y Jay fueron directo al baño a lavarse los dientes.

Jay era un poco más bajo que Tyler, que este último era mayor que su hermano por cuatro años. Tyler con diecisiete y Jay con trece.

—Aveces te siento ausente.—Comentó el menor viendo a su hermano mayor por el espejo y con el cepillo de dientes en la boca.

—¿de qué hablas?—Dijo con la boca llena de pasta dental.

—Que aveces parece que estás pero no estás, ¿entiendes?—Respondió.

—Reza por eso.—Lo dijo en broma. Con sarcasmo, pero Tyler sabía que su hermano se lo tomaría muy enserio.

—Lo eh hecho. Sé que aveces papá y mamá pueden ser un poco pesados con eso, pero ellos quieren lo mejor para nosotros dos, y están orgullosos de los dos. 

Tyler también sabía que Jay veía todo color rosa, pero todo era muy tóxico la mayoría de veces. Empezando por el obligarse a ser alguien que no era, alguien con quien no estaba cómodo.

El mayor de los hermanos, cuando estaba envuelto en las sábanas listo para dormir volvió ese recuerdo.

Estaba enfermo.

O al menos a los ojos de Dios lo estaba.

Empezó desde muy temprana edad a darse cuenta de eso. Cuando veía televisión con su hermano y en vez de fijarse en la chica se fijaba en el chico, y después su padre decía: "gustar de alguien de tú mismo sexo es pecado, irás directo al infierno."

Después, cuando a sus doce años, se dio un piquito con un chico de su salón. Algo de niños y totalmente inocente. Sus padres obviamente no sabían de eso, pero Tyler de doce años lloraba cada noche pensando en que iría al infierno, y hacia cualquier cosa por rescatarse a sí mismo aún sabiendo que no lo lograría.

Por último, el chico que le gustaba, un tal Ambrose Warren. Un tipo que no sabía ni que Tyler existía. O bueno quizás sí, pero no parecía percatarse del castaño en lo mínimo.

Absolutamente nadie sabía de los sentimientos del castaño por Ambrose. Nadie podía saber. Aveces hasta el mismo se avergonzaba pero no los podía apagar.

¿Cómo podía controlar a su corazón para escoger a quien amar?

No podía.

•••

Hola <3

Como me encanta empezar historias <33

Primero que nada no quiero ofender a nadie. La verdad es que no me llevo con la religión así que tampoco sé mucho del tema, aún así intento informarme antes de poner cualquier cosa en los fanfics para que no sea información errónea.

En fin, esta historia va a estar algo "ruda" por decirlo así, porque pienso arriesgarme más con diferentes escenas y temas ajsgajsgajd

Como estoy yendo al colegio me quita mucho tiempo, más las tareas y exámenes, así que no voy a poder actualizar todos los días, pero si voy a intentar actualizar cuatro veces a la semana.

En caso de que no sea así perdón <\3

No me gusta quedar mal con los fanfics ni nada, al contrario lo hago por diversión, porque me gusta, y más que nada para que a ustedes les guste y entretenga. <3

Espero que todxs estén bien. Y bueno, espero también espero que les guste. 💓