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—Estas más estresado de lo normal guapo...¿todo bien?—Preguntó el querubín.

—Sí. Sí no te preocupes.—Sonrió nervioso.

—Tyler para ser el Diablo, mentir se te da la mierda. Dime...—Josh se acercó algo coqueto comenzando a darle besos en las mejillas.

—Josh...—Se sonrojó.—Es que... en el instituto yo... sin querer hice que Ambrose entrara en coma. Casi lo mato Josh yo...

—¿Primera vez que matas a alguien o qué?

—Eh...

—No quiero que me respondas eso estoy bromeando. Lo siento. ¿A ver y eso por qué pasó?

—Es que me enojé y bueno... cuando me enojo las cosas se me salen un poquito de las manos.

—Ya veo. Ty, verás, esta bien. Fue un accidente, y el no está muerto, nadie sabrá nada. Es decir nadie te vio ponerle un dedo encima así que no fuiste tú. Relájate si.

—No puedo Josh. O sea... me cago en la puta.  No sé por qué. ¿Por qué yo? Mierda.—Se tapó la cara con las manos.

—¿escuchas eso?—Dijo intentando distraerlo.—Sí, es Moon River, de Andy Williams.

Tyler se quedó mirándolo con el ceño fruncido mientras Josh bailaba al ritmo de la canción.

Estaban a las afueras de la ciudad bajo las estrellas y la luna. El auto de Josh estaba junto a ellos y tenía la radio puesta. Eh ahí la fuente de la música.

Tyler estaba apoyado contra un árbol mirando a su ángel bailar aquella canción de hace unos cuantos años atrás.

—Amor.—Murmuró Josh. Tyler se quedó mirando sin responder.  —Si, tú. Ven.—Le extendió la mano.

Tyler se ruborizó ante aquel llamado de "amor". Sonó angelical en la boca de Josh. Como si fuera una palabra echa solo para él que fue pronunciada por la boca que más deseaba probar.

—Yo no... no sé bailar.

—No te pregunté.—Josh lo tomó del brazo, y lo pegó a él.

Ninguno de los dos estaba muy seguro en cómo bailar tal canción pero aún así, Tyler puso sus manos alrededor del cuello de Dun, y este alrededor de la delicada cintura del Diablo.

De un lado a otro, se fundieron.

La noche, la canción, el ambiente que hicieron y ellos.

Dos almas completamente distintas, pero tán enamoradas como para crear una sola.

Josh sentía la respiración del otro en su pecho. Y Tyler sentía los latidos de Josh.

Si ambos pudieran describir lo que sintieron hubieran sido incapaces de hablar.

Un gesto tan sin importancia tal como bailar bajo la noche, fue tán importante para ellos.

Lo suficientemente importante como para darse cuenta que estaban enamorados. Claro que ambos sabían que se gustaban desde hace días. Quizás semanas, pero ese momento fue perfecto para enterarse que se deseaban.

Tyler levantó la mirada para ver a Josh.

Y este último sin pensarlo se acercó a besarlo.

Ese beso en el que ambos se fundieron uno húmedo de los que tanto les gustaba.

Tyler bajó por el cuello del otro dejando su esencia en cada beso o caricia.

Entre besos, algún que otro chupete y empujones llegaron al auto, en el cual abrieron la puerta de atrás para tener más comodidad.

Tyler empujó a Josh haciéndolo caer de espaldas contra los asientos, para después subirle encima a seguir disfrutando sus besos.

El diablo pasó sus manos por el torso del angel , levantando su camisa para toparse con su torso desnudo, dejando besos sobre este y recorrerlo con sus manos.

Joshua tomó el cabello del otro entre sus manos, apretándolo para dejarlo bajar aún más. Y claro, el diablo quería. Bajó aún más, y dejó besos en la entrepierna del otro por encima del pantalón.

Un pantalón que no faltó mucho para bajarlo junto a su ropa interior para toparse con la erección justo frente a él. Algo que el diablo no desaprovechó.

La tomó con su mano, comenzando a acariciar el miembro, lamiendo levemente la punta de este escuchando como el ángel le pedía más. La lengua del castaño recorrió la erección de arriba a abajo.

Tyler desabotonó sus pantalones, al igual que bajó su ropa interior dejando a la vista ahora su miembro. Joshua sin pensarlo dos veces envolvió sus piernas en la cintura del diablo.

Tyler con todo el cuidado del mundo y como si fuera la porcelana más fina, se inclinó sobre el otro apoyándose en uno de sus brazos, y con el otro metiendo su miembro en su entrada con muchísimo cuidado.

Dun jadeó, y respiró con fuerza.

El diablo movió su cadera, y poco a poco se hizo un vaivén entre ambos cuerpos. Las ventanas del auto comenzaron a empañarse, y los jadeos, gemidos y respiraciones agitadas se apoderaron de todo el lugar.

Ambos deseándose el uno al otro. Josh pasaba sus manos por la espalda del castaño que tenía encima, y cada tanto dejaba sus uñas marcadas en esta zona, mientras se mordía el labio inferior.

Tyler por su lado sentía el miembro erecto del querubín rozar su abdomen, entonces mientras mantenía el vaivén, la mano que tenía libre bajó al miembro para comenzar a masturbarlo.

Al sentir el tacto del Diablo, Dun arqueó un poco la espalda y un gemido que volvió loco al otro. El vaivén cada vez era más rápido y con más necesidad. Al igual que los movimientos con su manos.

Al cambiar de posición, el diablo se sentó en uno de los asientos, específicamente el del medio, el ángel se sentó encima de él, y comenzó a rozar ambos miembros entre sí en un movimiento de caderas que volvió loco a Tyler.

Josh puso sus manos alrededor del cuello de Tyler y comenzaron a besarse con desespero mientras ambos de sus miembros se sentían entre sí.

En el beso se sentía la respiración agitada de ambos. Y el deseo se respiraba. El ambiente cada vez era más caliente y sensual favoreciendo la situación.

Tyler bajó su mano y tomó ambos miembros moviendo su mano de arriba a abajo, y Josh sabiendo lo que pasaría hundió su rostro en el cuello del ente para besarle ahí, y ademas gemir al sentir la esencia de ambos salpicar el abdomen del otro.

Los músculos aún estaban tensos sintiendo el orgasmo de cada uno. Y procesando como habían terminado teniendo sexo en el auto del hijo del sacerdote.

—Joder...—Logró decir Josh luego de un rato.

—Que buen ángel eres, eh?—Le murmuró el diablo al oído dejando un beso en su mejilla. —Me vuelves loco.—Agregó.

Ante ese comentario el ángel se sonrojó.

El diablo bajó sus manos a los glúteos del ángel que aún estaba sentado sobre el, y de ahí comenzó a dejar besos sobre su cuello y pecho.

Sin ninguna intención, solo caricias por parte del rey del infierno.

Dun lo miró, y ambos rozaron sus narices para después besarse por otro rato.

Un muy largo rato.














•••

Nunca es tarde para meter una escena así 😚

Que nerviosa me pone escribir esto, y después re-leerlo para revisarlo Nono re nervioso perdón Ajwbdkahdjwh
En fin.

Trabajo honesto. 😚💐

𝐐 𝐔 𝐄 𝐑 𝐔 𝐁 Í 𝐍 // [tysh/joshler]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora