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LILY
50/50.
Así es como estamos ahora, una parte ebria y otra parte sobria, hablando pendejadas al azar y riéndonos de ellas al punto en el que veo como Abraham aprieta las piernas para no orinarse, San parece un tomate y a los otros se les salen las lágrimas.
Siempre estoy pendiente del reloj porque sé que tengo que empezar a alistarme por tarde a las 7:20pm y el reloj en este momento marca la hora de las 6:55pm, lo que me obliga a abandonar la sala para ir a tomarme mis pastillas, los chicos están en su burbuja de risa y por ello no notan que me estoy desapareciendo.
Cuando llego a mi habitación busco lo que tengo que tomarme y lo paso de una vez con un vaso con agua, el celular me suena notificándome un mensaje e inmediatamente me voy a verlo, Thomas.
"Paso por ti a las 7:30;)"
Le respondo un simple "Ok" con un corazón rojo y descarto la opción de volver a abajo, no me entero de lo que ven pero por lo que escucho desde aquí seguramente están viendo videos de risa y me es inevitable que de vez en cuando se me salga una carcajada porque sus risas son contagiosas, hasta que vuelvo a mi campo de visión y voy directo a mi armario en busca de algo que me haga sentirme cómoda pero sexy, yéndome por la opción de un enterizo negro de tela holgada, me pongo un poco de maquillaje y termino con una cola de caballo de peinado.
— ¿Interrumpo?
Vuelvo a ver sobre mi hombro a San cuando lo escucho.
—No, pero estoy algo apurada—. Le advierto cuando cierra la puerta y se sienta en mi cama.
—No pienso quitarte mucho tiempo.
Su tono de voz me advierte, es dulce, delicado y pacífico. Tres simples cosas que me hacen que camine a él con pasos firmes pero lentos hasta que me siento a la par.
—El día de hoy estuvo bien ¿no? —Me pregunta volviéndome a ver y asiento logrando que él me sonría—, por fin soy libre pero pago un buen precio por ello, creo que estoy en algo con uno de mis mejores amigos, los chicos lo aceptaron, reímos como hace mucho no lo hacíamos y... —se lame el labio inferior creando unos segundos de silencio—, tú estás con Thomas.
Sus últimas palabras me hacen quitarle la mirada de encima y reír interiormente e incluso se me sale una carcajada.
—No, no estoy con él—le aclaro de una vez por todas y por mi reflejo puedo ver como junta las cejas confundido—, es complicado—y ahora las enarca abriendo la boca para hablar, pero lo detengo porque no he terminado—, porque yo lo quise así, por lo menos por ahora.
Me levanto en busca de unos zapatos más cómodos, por el espejo puedo verlo y no sé si veo satisfacción, confusión o ambas cosas en su cara.
—Pero lo de ustedes va en serio ¿no?
—Sí—mi respuesta parece confundirlo más—, es complicado porque nos estamos conociendo—me hace una mueca y logra hartarme de este tema de conversación—, es difícil de explicar.
Termino el tema.
—Ustedes dos son difíciles juntos, esa es la frase para ustedes querida mía.
O eso creía.
«Porque de una u otra forma lo sabía. Pero no me atrevía a aceptarlo o a pensarlo demás.»
Esto es así porque ya no soy la misma de antes, porque como Thomas me lo ha mencionado, él es un demonio, y los demonios buscan ángeles para calmar sus necesidades.
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VOLANDO ENTRE LO AMARGO. Libro 2. [En edición].
RomanceDos años han pasado desde el acontecimiento de Lily y Thomas, dos años en los que no se han vuelto a ver la cara, dos años en los que Lily cambió no solo físicamente, sino también mentalmente, y eso también implica el que su manera de pensar cambiar...