𝔊𝔬𝔱𝔞𝔰 𝔡𝔢 𝔞𝔤𝔲𝔞 𝔡𝔲𝔩𝔠𝔢 [Terminada ✓]

18. El permiso

Mis manos sudan y estoy seguro de que las de Angela se encuentran de la misma manera, su padre llego nuevamente a su casa, lo cual implica hablar con él para pedir permiso de poder viajar.

Estoy más que seguro de que se negara ¿Qué padre dejaría viajar por si sola a su hija? Digo su papa es demasiado estricto por todo lo que me ha contado sobre él.
Ahora mismo nos encontramos en la sala de Angela esperando a que su padre termine de ducharse.

Pasado de cinco minutos su padre llega a la sala y se sienta dándome una mirada de desaprobación.

Algo que eh de admitir es que se ve muy bien para su edad mayor que ya tiene.

Viste de unos pantalones de mezclilla y una playera que se ajusta muy bien a su tronco.

Algo muy característico de su padre es su barba no completamente blanca y su cabello largo color azabache.

—Gregory —me mira como si estar ahí fuera muy malo para mi vida.

—Hola señor —trato de que mi voz salga firme.

—Angela.

—Hola papi —saluda a su padre con una sonrisa.

—¿A que se debe tu visita chico? Quiero suponer que es algo importante. —me habla amable como de costumbre pero se que con el más mínimo error se pondrá de muy mal humor.

—Si amm bueno... Eh venido a su casa para que Angela y yo le pidamos su autorización sobre algo.

—No le den vueltas al asunto, sean directos.

—Queremos ir a México —habla de repente Angela —Sabes que la mayoría de edad...

—¡No! —la interrumpe —No dejare que viajes sola con el —me señala —Y si, se que la mayoría de edad en México es a los 18 y para que cumplas tu mayoría de edad aún faltan quince días ¡Aún no lo eres!

Vaya si que lleva la cuenta de los días que le faltan a su hija.

—Entonces... Si va alguien con mayoría de edad ¿Nos da la autorización? —hablo.

—Aja —pone los ojos en blanco —pero claramente yo no puedo ir con ustedes, y la madre de Angela tampoco...

—Mi mamá puede —lo interrumpo —Mire, tenemos el dinero ahorrado, en el tiempo en el que usted no estuvo estuvimos trabajando para ahorrar dicho dinero. Por favor mi mamá puede ir, prometo que podremos cuidarnos.

Su mirada cambia de desaprobación a aprobación ¿Acaso funcióno lo que dije?

—¿Estuvieron trabajando? ¿En donde?

—En una cadena de comida rápida —habla Angela —Con el amigo de Gregory, Carl. Se que suena ridículo porque en ese tipo de lugares no se gana mucho dinero. Pero en verdad funcionó papá ahorramos suficiente dinero para poder ir. De hecho Carl también irá con nosotros.

—Necesito ver el dinero en este preciso momento.

Por suerte lo traigo en mi mochila. Saco un sobre con dicho dinero y se lo muestro a su padre.

—Aqui esta el dinero.

Abre su boca formando una perfecta O —¿En verdad juntaron todo este dinero? Es demasiado chicos.

—Lo hicimos papá, tienes razón en lo que me has dicho, cuando te lo propones puedes lograrlo.

—Claro que lo que digo es cierto. —se queda callado por unos segundos y el silencio es muy cómodo. —Esta bien irán, pero antes de todo quiero conocer a ese tal Carl y también a tu madre —me dice. —Antes de todo necesito que me digan cuando y porque quieren irse a México.

—Habra un concierto de "maldita vecindad" en México exactamente el día del cumpleaños de Angela, pero pensábamos irnos antes porque los boletos por línea ya están agotados...

—Y para poder comprarlos necesitamos ir a la taquilla —me interrumpe Angela —maximo podremos comprarlos hasta el 1 de noviembre —se ve nerviosa, siempre que lo está juega con sus dedos.

Su padre pasa su mirada de Angela hacia mi varias veces, con un semblante ¿Relajado? Y ¿Alegre?. ¿El podía estar alegre? Lo dudo mucho. La mayor parte del tiempo me miraba de mala forma pero está vez era... Diferente.

—Guarden este dinero... —deja la frase al aire.

—¿Que? Papá hemos trabajado muy duro para ahorrar ese dinero no pue...

No termina de hablar porque su padre la interrumpe —Yo pagaré sus boletos del avión incluyendo los de tu madre y tu amigo —una ves más me señala.

¿Qué? Cómo que el pagaría los boletos ¿En verdad esto estaba pasando? ¡Que alguien me pellizque!

—¿Qué? No señor, no puedo aceptar eso —hablo demasiado rápido.

—Oh claro que puedes. Angela... —se dirige a ella —¿Podrás cuidarte sola?

—Claro que si papá y lo sabes.

—Bien... Cuando se vaya Gregory necesito hablar contigo ¿De acuerdo?

Ella asiente con su cabeza —claro que si papá.

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—¿Tienes planes para Halloween? —hablo rompiendo nuestros silencio.

Angela me invitó a comer y ahora mismo nos encontramos en su patio trasero viendo las nubes y a los pajaritos que vuelan por encima de nosotros.

—No acostumbro celebrar eso —se encoge de hombros —Me gusta más la tradición Mexica de celebrar a tus difuntos es mejor conocida como "El día de muertos"  Aunque no lo niego me gustaría celebrar un Halloween, aunque supongo que lo hacen de manera diferente.

—¿A qué te refieres con diferente?

—Eh visto películas en las cuales aquí el Halloween lo celebran en ya fiesta de disfraces, mientras que en México literalmente ponen música en una calle grande y la gente concursa con sus mejores disfraces dando de vueltas al rededor de dicha calle.

—Oh..., Eso es raro —me rió un poco por lo bajo —Pero tienes razón aquí se hace fiesta de disfraces, tengo una idea... Bueno primero de todo ¿Cuando celebran a los muertos en México?

—El 2 de noviembre ¿Por qué? —ella enarca una ceja mirándome esperando una respuesta.

—Ok, yo te llevaré a una fiesta de disfraces la cuál organiza Carl, mientras que tú me enseñarás cómo es celebrar a los muertos ¿Te parece?

—Me encanta esa idea. Justamente estaremos en México cuando eso suceda —habla tan emocionada que me quedo anonado mirándola.

—Me gusta verte feliz y verte hablar de lo que más te gusta.

Sus mejillas empiezan a tomar un color rojo carmesí e inmediatamente posa su cabeza un poco abajo de mi hombro —Te quiero.

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Nota de la autora:

¿Que prefieres el día de muertos o Halloween?

Hasta aquí mi reporte Joaquín. 💗