Leylah Riddle

06

06. En busca del primer Horrocrux

Leylah miró con agradecimiento a Sirius. Confiando plenamente en su palabra de mantener a salvo a Oliver.

Era lo único que necesitaba en aquel momento, asegurarse que estaría a bien y cuidado

— Gracias — Le dijo. Recibió un asentimiento de su parte.

Se acercó hacia la ventana para ver como seguían torturando a los pocos invitados que quedan. La mayoría habían logrado escapar y solo se encontraban los Weasley y miembros restantes de la orden como Remus, Tonks y algunos que Leylah no conocía, como los padres de Fleur. Estaban todos atados e indefensos sin sus varitas

Por lo que podía apreciar, solo quedaban tres mortifagos, el resto ya no estaba.

— Tengo irme y asegurarme de que Harry aun este con vida — A pesar de lo que dijo, no hizo movimiento de desaparecer. Escuchó la puerta de su casa abrirse de forma abrupta y el sonido de vidrios rotos y cosas cayéndose al piso. Sus ojos resplandecieron por un segundo en dorado. — pero antes, debo hacer algo

Sirius no hizo amago de detenerla cuando caminó hacia la puerta. Él sabía lo que haría y estaba totalmente de acuerdo con ello. Se acercó a la cuna cuando la puerta se cerró, mirando al niño dormir pacíficamente, sin saber que no vería a Leylah por meses. Si lo hubiera sabido, la habría abrazado tanto tiempo como hubiera podido

Leylah bajó las escaleras escuchando gritos de dos mortifagos y el desastre que estaban causando

— ¡Tu revisa el piso de arriba! — Gritó uno — Buscaré algo por aquí.

— ¿Buscaras Galeones, Gary? ¡Por Merlín, solo estas atrasando nuestro trabajo! – Contesto irritado el otro – Nuestro Lord se enfadará si se entera que nos desviamos de nuestro objetivo

Leylah se asomo a la sala, encontrándola destruida. Vio a los mortifagos discutir entre ellos y los apuntó con la varita

— Desmaius — El primer hombre, el que creía que se llamaba Gary, vio a su compañero caer al suelo – Expelliarmus

La varita voló en su dirección, la tomó en su mano y la rompió contra su rodilla. Los pedazos cayeron al suelo.

— Ahora, ¿Gary, cierto? — Se acercó con su varita en alto y se la puso contra el cuello y lo empujo hacia adelante — Camina

Pasaron por encima del cuerpo y siguieron su camino hacia afuera. La noche estaba más fresca, pero con la adrenalina, casi ni lo sentía.

— ¿¡Encontraron algo?! — El tercer Mortifago, que seguía custodiando a los demás, preguntó.

Leylah avanzo hasta aparecer en el panorama. Caminó hasta quedar frente a él, golpeo la parte trasera de la rodilla de Gary y este se dobló casi arrodillándose en el suelo. — Bueno, me encontró a mí. – Contesto la pregunta. A punto a Gary y dijo — Petrificus totalus — El cuerpo cayo hacia un lado por inercia, Leylah levantó su vista hacia el ultimo — Eso nos deja solo a nosotros dos. Te recomiendo rendirte e irte