La calma antes de la tormenta [Tom Riddle y tú]

El Despertar

...

Al separarse de su amigo, se apresuró a tomar la mano de Mattheo para presentarlos.

---Eric, él es mi hijo, Mattheo--- le presentó, Yaxley estrechó su mano, callando sus dudas.

---Un placer--- dijo el joven Riddle con una sonrisa calurosa.

---Es más hijo tuyo que de Tom--- bromeó, alegre de que no tuviera el carácter de su padre.

---Y el es mi padre, Belmont--- le presentó, el mago estrechó igualmente la mano de Eric.

---Un gusto--- dijo Eric.

---Ya conoces a Mía, Lea y Cassandra--- prosiguió ella, Abbott saludó alegremente al mago con un rápido movimiento de mano, Malfoy le sonrió fugazmente y Carrow se limitó a subir las cejas a manera de saludo.

Él asintió, con una sonrisa estática, pasando su mirada por todos y cada uno de los presentes.

---Lo siento, pero ¿No ustedes estaban...?.

---¿Muertos?--- lo cuestionó Cassandra.

---Lo estamos--- respondió Lea con franqueza.

---Igual que tú, sabelotodo--- añadió Mía, recibiendo una mirada de reproche por parte de su novia.

---Lo sé, es decir, la última cosa que recuerdo es estar muriendo en los brazos de Neela. Pero si todos aquí estamos muertos--- dedujo mirando a Neela ---¿Eso significa que...?

---Oh, no, no, no. Es sólo que estoy en un coma mágico, porque, la noche que fui a ayudarte, bueno... Digamos que comprometí mi salud--- respondió.

---¿Te mejorarás?--- preguntó su amigo preocupado.

---Sí, cuando me cure... Me iré de aquí--- dijo con pesar, observando de reojo a los demás.

---Jasper y Elena--- recordó ---¿Están bien?.

---Están a salvo, Vallerie y Penélope cuidan de ellos--- le aseguró ---Mía ¿Podrías sacar de nuevo el espejo?--- le pidió.

---No es como que pueda decir que no--- soltó ella, apareciendo de la nada el objeto ---Muéstrame a Jasper Avery--- ordenó.

Justo como la otra vez, la imagen de un niño apareció en el espejo, sólo que está vez era más grande, justo en su cumpleaños número 8.

Eric acarició el espejo con una sonrisa triste.

---Es idéntico a su madre--- dijo al observar su cabello negro y ojos azules ---¿Qué hay de Elena?.

---Muestranos a Elena White--- ordenó Mía.

La imagen de Elena, cuyo cumpleaños número 8 estaba siendo celebrado igualmente, apareció en el espejo.

---Está tan grande--- soltó el mago, limpiando la lágrima que se escurrió por su mejilla.

---Es idéntica a ti, Eric--- le dijo Neela, colocando su mano en su hombro a manera de apoyo.

---Ya no son los bebés que perdí aquella noche--- dijo con el labio temblando ---Cuando despiertes, hazles saber que su padre los ama, por favor--- pidió con los ojos llorosos.

Ella asintió, empatizando con su dolor.

---Eris ¿Cómo está Eris?--- preguntó.

---Muestranos a Eris Yaxley--- ordenó Mía.

La imagen de la pelinegra viviendo en una mansión abandonada apareció en el espejo, la bruja tenía puestas dos muñequeras que inhibían sus poderes, las cuales el ministerio había creado principalmente para Neela.