El trauma de Lucius.

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...

Una vez que inició Agosto y el ciclo escolar terminó, dejó de lado el Express de Hogwarts y mejor se fue volando en su forma de nube negra a la mansión tenebrosa, pues tenía prisa.

Con un movimiento de mano abrió de forma estruendosa la puerta, haciéndola chocar contra las paredes.

En seguida Tom salió de su oficina acompañado de un par de mortífagos, preparándose para castigar a aquel que se atreviera a irrumpir en su casa de tal forma.

Pero al ver que era su esposa una sonrisa se formó en su rostro, que no duró mucho al ver la furia que brillaba en sus ojos.

---¿Te han hecho algo?--- preguntó con el ceño fruncido, avanzando hacia ella.

---Me arrebataron a mí madre, eso es lo que me han hecho--- se quejó la bruja, al fin frente a su esposo.

---Neal, no te sigo. Pensé que los aurores ya habían sido castigados--- soltó el pelinegro.

---No fueron sólo los aurores, Tom, fue también Septimus, él fue quien dio la información errónea. De no ser por él, tendría a mi madre aquí conmigo, mi abuela no hubiera regresado a India y mi abuelo no habría sufrido la pérdida de alguien más.

Tom guardó silencio, volteando a ver a sus mortífagos, ordenándoles con un movimiento de cabeza que se retiraran.

Guardó silencio procesando aún lo que su esposa le acababa de decir, soltando un suspiro.

---¿Estás completamente segura de que fue él?--- preguntó, pues no quería sacrificar a un mago sangre pura de su nivel de forma errónea.

---¡Lo vi con mis propios ojos! Y ambos sabemos que mis visiones nunca mienten--- dijo con la respiración agitada ---Debí matar a ese viejo mago mal nacido en el momento en el que me fui de la mansión Malfoy hace décadas atrás--- soltó furiosa, dando vueltas frente a Riddle.

---Aún no es demasiado tarde--- le propuso con la ceja arqueada y una mirada mañosa.

Neela dejó de dar vueltas.

---No puedo asesinarlo, es el padre de Abraxas...

---Quien está muerto--- le recordó el pelinegro, Neela sintió un pinchazo en el corazón al escuchar esto ---Sabía que su padre se lo merecía, él veía cómo te maltrataba de pequeña.

---Lucius le ha tomado cariño, si lo asesino, sería como si perdiera a su padre otra vez. No puedo causarle ese dolor--- dijo agachando la mirada, recordando al pequeño Lucius que ella tanto amaba, que había visto crecer.

---El Lucius que conocimos... Ya no está, hace tiempo que se fue--- le aclaró Tom mientras tomaba su mano ---Pero es tu decisión si quieres vengar la muerte de tu madre, o dejarás vivir a su asesino.

Neela frunció el ceño, apretando su varita.

Al poco tiempo los Riddle se Aparecieron juntos frente a la mansión Malfoy, y la bruja abrió la puerta de la misma forma que había azotado las puertas de su casa.

Dobby corrió asustado al escuchar tan repentino y horroroso estruendo.

---Señora... Señora Neela--- la llamó el elfo a manera de saludo, con su típica voz chillona más temblorosa de lo usual.

---Dobby, ve al jardín, no te haré testigo de lo que va a ocurrir--- el elfo doméstico la miró preocupado, y cuando Tom se acercó a paso amenazador a él, salió corriendo a donde la bruja le había indicado.

---¿¡Pero que es este escándalo!?--- exclamó el mago que buscaba, saliendo del pasillo con su bastón en la mano ---Tú...--- dijo con voz áspera al ver a la bruja.

La calma antes de la tormenta [Tom Riddle y tú] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora