C A P I T U L O 1 4
No era lo que imaginaba, tampoco había un gran lago como en las películas, siquiera había un bosque solitario. No.
Estaba en una residencia, en su residencia. Y sí, digna de un presidente, una enorme casa de verano con hermosa vista a la playa. Lejos de todo y de todos. Pensé que él vendría a enseñarme su casa o algo así, sin embargo Mark resultó estar más cansado de lo que pensaba. No ha despertado. Ha dormido desde que llegamos y solo me he limitado a mirar la hermosa vista a la playa, por las barandas de su balcón.
Deslize mis manos por el metal de aquella baranda, prácticamente girando mi coexistencia para observar a Mark acostado sobre su espalda, dormido. Doy un suspiro profundo arreglando mi fleco, la noche ha llegado y mi preocupación está en aumento. Precisamente hoy debía llegar temprano a casa. Dudo en que podré llegar a tiempo a la cena de media noche, mi reloj digital marca ocho media de la noche, podría decir que difícilmente me podré librar de un castigo.
Caminé hacia dentro de la habitación, me dirigí a cerrar el cristal de las ventanas de pronto había empezado hacer mucho más frío de lo que había.
Resoplé entre dientes, sentándome sobre el sofá de la habitación, crucé las piernas y saqué mi móvil de la mochila, debía inventar una buena excusa y llamar a mamá, solo ella podía convencer a papá de que me librara de un castigo en caso de que me creyera.
— ¿Qué hora es? —Vervalizó Mark en una pregunta. Su voz grave haciéndome brincar estando sentada.
Toqué mi pecho dramatizando que estuve al borde de morir a causa de un infarto y entonces lo miré. Su venganza fue un éxito, basta con un rechazo de salida para que Mark acudiera hacer que mis padres me dieran un gran castigo.
— Casi son las nueve— respondí en voz baja, casi inaudible. No tengo idea de por qué no estoy gritando, se supone que eso tenía pensado hacer eso cuando el despertara.
— Vamos, tengo un vuelo en una hora—dijo Mark, pasando una mano por su rostro, tal vez vacilaba en qué sería lo próximo a hacer. Aunque ya había dejado claro que debía montarse en un avión e irse. Supongo que será la última vez que lo vea. Ok, y justo cuando estamos a pocas horas de empezar un nuevo año.
— ¿Puedo ir contigo? —pregunté. No debí hacerlo, estoy mostrando mucho interés hacia Mark, algo que no es muy bueno, en mi larga vida he pensado que sé muy bien como ocultar mis sentimientos hacia otra persona, sin embargo con Mark casi me es imposible hacerlo.
Apreté mis labios y bajé la mirada ante lo dicho. — No es algo que debas preguntar, —replicó Mark, sonriendo abiertamente. — ya había decidido que debías ir conmigo— dijo él al final.
Podía notar el sarcasmo en su voz.
Ok, Mark piensa que tiene autoridad sobre mí. — Espera
Me levanté del sofá llendo en su dirección, mientras tanto, él se colocaba su chaqueta de cuero color negro o ¿azul?. El color no importa en este momento Andreina. Concéntrate.
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UN POSIBLE AMOR © (Completa)
Romance-Él parecía inasequible, sin embargo se volvió un posible amor para mí. -Andreina Fisk -Mark Williams PROTAGONISTAS DE: UN POSIBLE AMOR Una comedia romántica para disfrutar. ...